“Las condiciones de las obras en Sigena no son las idóneas”

El historiador de arte y conservador del Museu de Lleida Alberto Velasco puso ayer en entredicho el mantenimiento de las más de cuarenta obras trasladadas desde Ponent al monasterio de Sigena, asegurando que “hay detalles que nos hacen intuir que las condiciones del monasterio no son las más idóneas para estas piezas”. Durante una entrevista a Catalunya Ràdio, el experto en arte se mostró preocupado por el estado de las obras, sobre todo porque “el Tribunal Supremo podría acabar fallando a favor nuestro y las obras podrían volver al Museu de Lleida”. Y es que según Velasco, la sala donde se exponen las obras “tiene unos problemas de humedad y salinidad muy graves que no se pueden resolver porque el monasterio está construido sobre laguna”. “El día que el presidente de Aragón fue a ver las obras a Sigena habían colocado una de las piezas sepulcrales delante de una columna de climatización y habían mezclado pergaminos con tejidos y metales”, censuró Velasco, mientras subrayaba que estos procedimientos “incumplen todos los estándares internacionales de conservación preventiva”. Respecto al vacío que ha dejado esta colección en la pinacoteca leridana, Velasco dijo que “son unos huecos llenos de significado” y sirven para ilustrar el que considera el episodio más insólito del Museu Diocesà de Lleida, aunque se trata de una fase “puntual” y en un futuro expondrán nuevas obras. “El Museu Diocesà de Lleida es un gran museo con una gran colección, y no tendremos ningún problema para cubrir los espacios vacíos”, zanjó Velasco.

Por su parte, el ayuntamiento de Villanueva de Sigena presentó el pasado miércoles un escrito al juez de Huesca con el que volvía a pedir que la Guardia Civil entre en la pinacoteca leridana para llevarse la última de las 44 piezas de la colección, una pintura de La Immaculada que en el momento del traslado estaba extraviada. Velasco también censuró esta actitud, asegurando que “desde que se recuperó la obra siempre hemos tenido buena predisposición para entregarla”.

Asimismo, el presidente de Aragón, Javier Lambán, grabó ayer su tradicional discurso de Fin de Año en el monasterio de Sigena, un escenario que en esta ocasión cobra un significado mucho más simbólico.