ENTREVISTA LIBROS
Carlota Benet: «Mi padre, Benet i Jornet, ha vivido lo que había deseado»
La hija del dramaturgo, afectado de Alzheimer, repasa en ‘Papitu. El somriure sota el bigoti’ su historia de amor con su padre y cómo afronta esta enfermedad degenerativa
Josep Maria Benet i Jornet (Barcelona, 1940) –Papitu para los amigos– es autor de una quincena de textos teatrales, aunque su faceta televisiva, con series nacidas de su pluma como Poble Nou, Nissaga de Poder, Ventdelplà o El Cor de la Ciutat, le lanzó a la popularidad y acabó otorgándole reconocimientos como el Max de Honor o el Premi d’Honor de les Lletres Catalanes. El dramaturgo afronta desde hace dos años y medio la etapa más dura de su vida, afectado de Alzheimer, e ingresado en una residencia en la capital del Segrià, ciudad en la que reside su hija, Carlota Benet, profesora en la Universitat de Lleida y autora del libro Papitu. El somriure sota el bigoti, que acaba de publicar Columna.
¿A quién dirige esta obra?
Le puede interesar a cualquier fan de la vida y obra de Benet i Jornet, pero también a gente relacionada con afectados por enfermedades degenerativas. Y como historia de amor entre un padre y su hija, también les puede gustar a todos los interesados en las historias humanas, porque en el texto hablo de la decadencia, del paso del tiempo, de la muerte y también de la vida y de la memoria.
¿Cómo surgió la idea del libro?
De hecho, todo comenzó con una entrevista que me hicieron junto a Cristina Maragall, la hija del President Maragall, también afectado de Alzheimer. Desde la editorial nos propusieron escribir un libro conjunto sobre esta enfermedad, pero mi texto acabó evolucionando y se convirtió en una narración sobre el declive de mi padre pero también sobre los recuerdos felices de la infancia y nuestra vida en común, pero sin ocultar tampoco los momentos difíciles y las riñas familiares.
¿Un ejercicio terapéutico?
Sí, me ha ayudado a digerir la rabia y la impotencia que tienes al principio y a valorar lo bueno de la vida, que eso sí siempre acaba con la inevitable muerte.
¿Y cómo ha sido la vida de su padre?
Pues he visto que mi padre consiguió durante su vida todo aquello que había deseado: vivir de la escritura, viajar, hacer teatro..., y todo esto nadie se lo quitará. Después de esta vida plena, resulta un desconsuelo.
¿Seguirá el oficio de escritora?
Este libro fue la excusa para intentar escribir y ha sido una experiencia maravillosa. He aceptado que quiero escribir y ya estoy con una obra de ficción.