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Pep Coll 'huye' del Pallars en un viaje a la antigua Grecia
Tras el éxito de lectores y crítica de Dos taüts negres i dos de blancs (2013), el escritor pallarés Pep Coll (Pessonada, 1949) ha buscado para su nueva novela un “cambio” radical. “Quería huir del Pallars”, confesó ayer a SEGRE unas horas después de presentar en Barcelona su nuevo libro, Al mateix riu d’Heràclit (Proa), “una huida también hacia mis años de juventud y hacia la filosofía”, añadió el escritor leridano. Y para escenificar este regreso a su época universitaria, Coll volvió a sentarse en el banco de madera de la antigua aula donde estudió Filosofía a principios de los años setenta en la Universitat de Barcelona, hace más de cuarenta años. “Me hacía gracia volver a los orígenes, igual como en esta novela, en la que regreso a los orígenes de la filosofía”, comentó. Para ello, el novelista no se ha detenido en los nombres más populares y ‘mediáticos’ (Platón, Sócrates, Aristóteles...) sino que ha retrocedido muchos años más atrás hasta Heráclito, “hasta la época en la que se comenzó a pensar sobre los fenómenos de la naturaleza sin los dioses, el momento de los primeros pensadores”. En sus años de estudiante universitario le atrajo la figura de este filósofo, hijo de una familia aristocrática de Éfeso, en el Asia Menor (actual Turquía), que vivió entre los siglos VI aC y V aC y cuya existencia es conocida solo porque otros autores posteriores le citaron en sus obras ya que su único texto escrito se perdió. De hecho, Platón salvó –aunque citándola de forma errónea– una de sus sentencias más famosas: “Ningún hombre puede bañarse dos veces en el mismo río”. Pep Coll utiliza un recurso literario –el hallazgo de un manuscrito inédito sobre la obra perdida de Heráclito en 1972 por parte de un estudiante de Filosofía de la UB, un ‘alter ego’– para tejer una biografía novelada de un personaje que el escritor leridano considera “muy lúcido, con un pensamiento filosófico muy actual”. Eso sí, Coll considera que esta obra “es más de pensar que de emocionar y sorprender”, como podía pasar con títulos anteriores.