«Todavía me queda mucho camino por recorrer como actor»

La primera jornada de la 24 Mostra de Cinema Llatinoamericà de Catalunya tuvo como acto principal la entrega de premios al actor Eduardo Noriega (Premio de Honor), la cineasta Sílvia Munt (Premio Jordi Dauder), el periodista Gerardo Sánchez (Premio Ángel Fernández-Santos) y al músico argentino Osvaldo Montes, galardonado con el primer Premio Talento Latinoamericano. Desde SEGRE entrevistamos a Noriega y Munt, dos grandes profesionales del séptimo arte y con una amplia filmografía.

¿Qué supone para usted recibir el Premio de Honor de este certamen?

Estoy muy orgulloso. Creo que cuando recibes un Premio de Honor o eres muy mayor y piensas que te lo dan porque te quieren retirar, o eres demasiado joven y quizás no lo mereces. A mí me ha cogido justo en medio y confío en que sea un premio prometedor en cuanto a mi carrera en el cine iberoamericano. Todavía me queda mucho por recorrer.

¿Qué opinión le merece la Mostra?

Siempre me dan cierta envidia sana las ciudades que tienen una muestra de cine. Yo soy de Santander y he echado de menos un buen festival en el que la gente se acostumbre a ver films de otros países. Me parece un privilegio, sobre todo en cuanto a cine latinoamericano, que necesita de este tipo de certámenes para darse a conocer porque su distribución es mucho más costosa.

¿Qué diferencia hay entre rodar en España y en los países latinoamericanos?

No hay mucha diferencia, solo depende de la personalidad del director −cómo piensa y cómo se relaciona con los actores−. El cine de Hollywood sí que es otro mundo, porque dependes de un estudio y hay muchísima gente por encima del director.

Durante su carrera de más de 20 años ha trabajado bajo las órdenes de cineastas como Alejandro Amenábar o Guillermo del Toro. ¿Con qué otro director le gustaría rodar?

Pedro Almodóvar sería uno de ellos, sin duda. Aquí en Catalunya me gustaría mucho trabajar con Mar Coll, Carla Simón o Carlos Marqués-Marcet, por nombrar algunos.

¿De qué trabajo se siente más orgulloso?

El trabajo con Amenábar es muy importante, pero también el de Marcelo Piñeyro. Tengo la suerte de haberme cruzado con muchos profesionales brillantes en mi carrera.