Quim Monzó alerta de “tiempos en los que haya que escapar de la opresión”

El escritor Quim Monzó, que recibió ayer el 50 Premi d’Honor de les Lletres Catalanes de Òmnium Cultural en un acto en el Palau de la Música, en Barcelona, recordó “cuando después de la Guerra Civil hubo que llevarse a autores en bibliobús al exilio”, y se preguntó si algún día habrá que volver a “escapar de la injusticia, la opresión y la tiranía”. El acto contó con la presencia del presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el del Parlament, Roger Torrent, que al entrar recibieron un largo aplauso al grito de ‘Libertad’ por parte de los asistentes, entre quienes estaba el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, y la nueva consellera de Cultura, Laura Borràs, que acompañaron al público entonando Els Segadors, al grito también de ‘Libertad presos políticos’ e ‘Independencia’. Monzó empezó diciendo que “sé que tengo que decir algo, porque no puede ser que coja el premio y me vaya a mi casa”, y siguió con una descripción sobre cómo recoger galardones, un ritual para el que recomendó hablar de seres queridos que ya no están o de los padres. El presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, en prisión, lamentó a través de una carta –leída por el actor Lluís Marco– no poder estar presente en un acto de amantes de “la cultura y la libertad” y advirtió que el antídoto hacia el totalitarismo “siempre será la cultura”. El vicepresidente, Marcel Mauri, repasó la historia de este premio, “con el que no pudo “ni el franquismo”. Los periodistas Mònica Terribas y Jordi Basté –que definió al premiado como “el Leo Messi de las letras”– destacaron la trayectoria literaria de Monzó en un acto repleto de notas de humor como un vídeo de Las Supremas de Móstoles y Albert Pla cantando Bona nit.