MÚSICA EVENTO
Un Paupaterres para nuevos públicos
El festival se abre al centro de Tàrrega y estrena vermut musical con éxito || El Paupakids sigue creciendo con numerosas actividades entre las que destaca una fiesta de espuma de colores
Tras más de dos décadas de trayectoria, el festival de música Paupaterres de Tàrrega ha decidido abrirse a nuevos públicos y a nuevos escenarios, con el fin de llegar a toda la ciudad. Así, ayer al mediodía estrenó un vermut musical en la terraza del Ateneu, que bajo un sol de justicia, estuvo amenizado con las actuaciones musicales del duo Walkin’ Roots y del cantautor Raül Benéitez. La nueva propuesta fue bien aceptada por el público, que solo buscaba las sombras de los parasoles para refugiarse de las altas temperaturas.
El Paupaterres siguió por la tarde en el camping municipal con una nueva edición del Paupakids, espacio totalmente consolidado del festival dedicado a los más pequeños, que contó con talleres, juegos de agua, espectáculo itinerante de payasos, pintacaras y, como novedad, una fiesta de espuma de colores, un holi de verano, según los organizadores. Los propuestas acuáticas fueron las que tuvieron mejor aceptación para poder refrescarse.
La jornada de ayer contó con los conciertos de Luar Na Lubre, Gossos y Lágrimas de Sangre
El Paupakids dio paso a la última noche de la 21 edición del festival, con conciertos amenizados con gastronomía y paradas de artesanía a partir de las 20 horas en el mismo recinto del camping. Los primeros en llegar pudieron gozar de la música de Fustegueres y Korrontzi, que dieron paso a los platos fuertes del programa: los veteranos de folk tradicional Luar Na Lubre y Gossos, una de las agrupaciones más emblemáticas del pop-rock en catalán con una intensa carrera musical desde 1993. Tras el cierre de esta edición, con el camping lleno hasta la bandera con miles de personas, estaba previsto que tuviesen lugar las actuaciones de Lágrimas de Sangre, Bemba Saoco y Dirty Brown. Cabe destacar que los iconos del ska y del rocksteady Discípulos de Otilia fueron baja de última hora por la enfermedad de uno de los integrantes del grupo. La noche del viernes, el Paupaterres congregó a más de 3.000 espectadores.