ENTREVISTA
«
El primer espectáculo de calle de las hermanas Clara y Ariadna Peya, una de ellas pianista y la otra bailarina, se presentará en la próxima edición de FiraTàrrega, que se celebrará entre los días 6 y 9 de septiembre
Las hermanas Clara y Ariadna Peya, una bailarina y la otra pianista, llegan a FiraTàrrega con su primer espectáculo de calle, Painball, una producción que habla de la libertad como individuos y sociedad, y de cómo nos modificamos y nos definimos. Entre sus obras anteriores, destacan piezas como Aüc-el so de les esquerdes, Llum de paraula, Zip, Limbo, (A)murs a love story, Mrs. Death o Tot és fum.
¿Qué esperan de su participación en un certamen teatral de la envergadura de FiraTàrrega?
Esperamos que sea una buena plataforma de lanzamiento del espectáculo.
¿Por qué han decidido ahora dar el salto a los espectáculos de calle?
Creemos que ahora es un momento indispensable para que se nos escuche más que nunca, para que todo el mundo tenga acceso a lo que queremos decir y porque es el momento de no callar. Pensamos que la calle es el lugar donde lo podemos hacer mejor.
¿Cómo nace la obra que estrenarán en Tàrrega,
Painball
?
Nace de la necesidad de explicar con palabras las injusticias. Como el hecho de que por rapear te metan en la cárcel, la ley Mordaza, las pelotas de goma y una serie de cosas que tienen que ver con la libertad de expresión.
¿Estos son los temas que tratarán en la representación que están preparando?
En la obra Painball hablamos de la libertad de expresión y de los privilegios sociales y lo hacemos a través de nuestros lenguajes que son la música y el movimiento. Contamos con la ayuda de Bel Olid, una escritora que nos ha puesto palabra a la obra, aunque debemos decir que el espectáculo es bastante abstracto, quizás uno de los más abstractos que hemos hecho nunca. El contenido es poco narrativo, es un lenguaje poco racional, de conceptos e imágenes que creemos que llegará al público de otra manera.
¿Qué reacción esperan que tenga el público que acuda a verlas a FiraTàrrega?
Nosotras queremos generar con el público un espacio de reflexión y empoderamiento, que la gente se atreva a hablar, a gritar y no callar. Nos gustaría conseguirlo.
¿Creen que
es un espectáculo que se podría llegar a representar fuera de Catalunya o incluso fuera de nuestras fronteras, a escala internacional?
Absolutamente sí, no solo por el contenido visual y artístico sino también por el contenido político, ya que desgraciadamente hay muy pocos lugares en el mundo donde haya una conciencia social que permita decir lo que uno piensa y lo que uno siente.
¿La idea inicial de un espectáculo como
ha cambiado después de los acontecimientos políticos que se han ido viviendo durante todo este año en Catalunya?
Evidentemente esto nos ha hecho reafirmar con lo que pensamos, que es el momento de salir a la calle. Los hechos que nos han empujado a hacer esto son la libertad de expresión de Valtonyc, la ley Mordaza o los golpes que se recibieron en el 1 de octubre. Nosotras no nos posicionamos políticamente, solo pedimos tener nuestro espacio para poder hablar y posicionarnos.