Inauguración oficial de la restaurada torre de Vilagrassa

La vicepresidenta primera de la Diputación, Rosa Maria Perelló (en representación del presidente, Joan Reñé, que no pudo asistir por un problema en un vuelo); el director de Cultura en Lleida, Josep Borrell; el obispo de Solsona, Xavier Novell; y el alcalde de Vilagrassa, Jordi Serés, inauguraron ayer las obras de restauración del campanario gótico de la iglesia de la localidad, que finalizaron hace un año pero cuyo estreno oficial, previsto con la asistencia de Puigdemont, tuvo que suspenderse por la situación política. Los trabajos permitieron hacer visitable el campanario, con lo que este municipio sumó un nuevo atractivo turístico. La actuación, con una inversión superior a 90.000 euros, sirvió para adecuar cornisas y capiteles, la vuelta del tejado y parte de las piedras, deterioradas con el paso del tiempo. También se habilitaron nuevos accesos en el interior, se renovó el mirador y se instaló iluminación en la parte exterior de la torre. Financiaron las obras la Diputació (a través del IEI), el Incasòl y el obispado de Solsona. El primer edil recordó que estas obras “eran muy esperadas” y destacó que “el turismo de patrimonio crece día tras día”, a la vez que apuntó que el campanario es conocido por su ligera inclinación. Por su parte, Perelló puso en valor el patrimonio como “símbolo de identidad” de los pueblos. La inauguración sirvió para dar el pistoletazo de salida a las fiestas, que se alargarán hasta el lunes. Tras el acto se presentó la exposición de pinturas en homenaje a Antoni Tartera, ‘Antonioti’. La peculiaridad de la muestra es que está formada por cuadros del homenajeado cedidos por los vecinos.