POLÍTICA CULTURAL POLICÍA
Investigan a la Institució de les Lletres en la etapa de Borràs
Un juzgado de Barcelona investiga a la Institució de les Lletres Catalanes (ILC) por un presunto amaño de contratos públicos, en la etapa en la que la actual consellera de Cultura, Laura Borràs, estaba al frente de esta entidad de la Generalitat, en un caso que se encuentra bajo secreto de sumario. Los Mossos practicaron ayer por la mañana, por orden judicial, un registro en la ILC (que Borràs dirigió durante cinco años, desde 2013 y hasta el pasado mes de enero, antes de suceder el pasado verano en la conselleria de Cultura a Lluís Puig) y también en la sede del Centre de Telecomunicacions i Tecnologies de la Informació (CTTI), que es donde se alojan todos los correos electrónicos del conjunto de consellerias del Govern de la Generalitat.
Según avanzaron El País y SER Catalunya, la policía investiga si durante el período en el que Borràs estuvo al frente de la institución cultural se contrataron de forma irregular los servicios de informática para elaborar páginas web. Las sospechas apuntan a que se trocearon los contratos para rebajar el coste de los mismos y evitar así presentarse a un concurso público. La policía catalana cree que podría haber un informático implicado en el caso. Tras conocerse la investigación, la consellera Borràs (Barcelona, 1970) aseguró que “no tengo nada que esconder”. “Estoy orgullosa del trabajo hecho al frente de la Institució de les Lletres Catalanes durante cinco años. Un orgullo que no es personal sino colectivo. Un trabajo determinado, honesto y transparente. Y un trabajo que ha puesto el acento, también, en el ámbito digital”, aseveró Borràs. La consellera añadió que “intentar generar sombras sobre este trabajo me entristece. Y en cierto modo me rebela, pero no tengo nada que esconder”. Borràs también aseguró que pondrá todos los medios para esclarecer hasta la última cuestión.
El CTTI ha estado en el punto de mira de la ofensiva judicial contra el 1-O y ha recibido desde entonces una treintena de intervenciones policiales, pero esta vez el caso no tiene que ver con el referéndum. El registro policial en la sede del centro, en L’Hospitalet de Llobregat, ya se ha convertido en una acción habitual para los trabajadores del CTTI, que la han vivido en más de una veintena de ocasiones en el marco de la ofensiva judicial primero para frenar el referéndum y después para investigar a sus responsables.