Compota de Manana llena la sala Manolita de ritmos cubanos

La sala Manolita acogió ayer el concierto La alternativa, con el que la banda de música cubana Compota de Manana, liderada por el músico leridano Erik Castillo, presentó su primer álbum de estudio. Se trata de un trabajo en el que Castillo y su ‘socio’ Carlos Pardo ahondan en la esencia del son cubano y modernizan la timba, nombre que recibe la música cubana moderna. Como ya había avanzado el líder de la banda en una entrevista a SEGRE, la actuación de ayer era “muy especial” pues, según apuntaba, “tocar en mi ciudad se ha convertido en un asunto personal”. Castillo se mudó a Cuba para estudiar música y allí permaneció durante nueve años. De su estancia destaca su riqueza cultural, al mismo tiempo que apuntó que “la gente es muy diferente, mientras aquí competimos por tener un coche más caro y elegante que el del vecino, allí compiten por el talento”. Las percusiones y los ritmos de este país son la inspiración del nuevo álbum La alternativa, cuyas letras narran las vivencias de este joven leridano. Catorce músicos se subieron ayer al escenario para repasar las nueve canciones del disco, entre las que destaca el single Sr. Presidente. Según el cantante, los referentes de este grupo van desde la música clásica de Chaikovski hasta el changüí cubano, pasando por el rap, AC/DC, Extremoduro y Queen. Sin embargo, “uno de mis referentes es el mítico músico habanero Juan Formell”. Con este proyecto pretende

“concentrar todas mis vivencias e inquietudes”, explica Castillo.