Un techo de hormigón armado

Antoni Gelonch (Lleida, 1956) publicó hace tan solo un año el que sería su primer libro, 100 dones. Inspiracions creatives. Y ya avanzó que no sería el último. En otoño llegó Luter, buscant la veritat, va canviar la història y el martes presenta en la librería Caselles 100 dones catalanes, inspiracions creatives. “Se dice que hay un techo de cristal que limita el ascenso laboral de las mujeres, pero me atrevería a afirmar que es de hormigón armado”. Gelonch ha incluido a seis leridanas en este volumen publicado por Viena Edicions: la doctora Martina Castells, la escritora Teresa Pàmies, la pedagoga y política Maria Rúbies, las autoras Maria Barbal y Maria Mercè Marçal y la periodista Txell Bonet. Un viaje desde el siglo XIX al XXI a través de reflexiones que estas mujeres han dejado escritas y de sus biografías, “muy distintas pero con una carácterística en común: son luchadoras”. El prólogo, de Mònica Terribas, reivindica que un libro como este sea muy pronto “un tesoro anacrónico”. Gelonch lo ratifica. Pero más allá de las intenciones, queda mucho camino por recorrer. “Estoy trabajando en un nuevo libro que se titulará Pioneres en el que reivindico a mujeres que fueron las primeras en algún campo. Y ya avanzo que habrá sorpresas. La primera santa es del siglo IV, pero la primera consellera, Maria Eugènia Cuenca, no ocupó el cargo hasta 1992”. De las 100 dones catalanes, Gelonch se queda con las que representan “la alegría perdida” de una generación “que resume qué pasó en nuestro país a partir de 1939”. Pone como ejemplo a Pepa Colomer, la primera aviadora. “Después de exiliarse, nunca más quiso volar, lo que me parece muy triste y significativo”. O Francesca Bonnemaison, creadora de la Biblioteca Popular de la Dona, “que tuvo que soportar que esta institución acabara siendo después de la guerra la sede de la Sección Femenina, una auténtica perversión de su legado”, lamenta este autor, farmacéutico, abogado y coleccionista de arte.