Lleida defiende que la documentación demuestra la adquisición de 83 de las obras de la Franja
El director del Museu de Lleida considera que han presentado pruebas "sólidas y válidas"
El juicio por la propiedad de las 111 obras de arte de la Franja ha acabado este viernes en el Juzgado 1 de Barbastro (Muesca|Mella) con las conclusiones de las partes catalana y aragonesa, que han sido totalmente contrapuestas. Los abogados del Obispado de Barbastro-Monzón y del gobierno de Aragón han insistido en que, entre la documentación presentada, no existe ningún contrato de compraventa de las piezas y que por lo tanto, la propiedad de las obras es de las parroquias originarias. El abogado del Obispado de Lleida, sin embargo, ha alegado que el código civil "no exige ningún contrato de compraventa como tal" y basa su defensa en los nuevos documentos aportados. En ellos, tal como ha explicado momentos antes el conservador del Museo Episcopal de Vic, Marc Sureda, se especifican, por ejemplo, transacciones económicas firmadas por mosenes de parroquias de la Franja para justificar la entrega de piezas artísticas a particulares y también al obispo de Lleida a cambio de inversiones en obras y mejoras en sus iglesias. "El concepto de recibo es muy claro", ha remarcado.
Por su parte, el director de Museu de Lleida, Josep Giralt, considera que los abogados de la parte leridana, tanto del Obispado como del Consorcio del museo, son "los únicos que han estado presentando pruebas actuales, firmes y válidas desde el punto de vista de jurisdicción civil".
Giralt ha destacado que los más de 4.000 folios presentados "suponen las pruebas documentales y ante notario de todos los elementos que consideramos fundamentales dentro del derecho civil y que demostrarían los contratos de compraventa, de permuta o de donación". El director del museo leridano ha dicho que sale "satisfecho" de la vista, aunque confía en que este proceso judicial "sea largo".
Al acabar el juicio, Josep Giralt ha señalado que "veníamos aquí no sólo a responder una demanda presentada por el Obispado de Barbastro-Monzón, sino también una contrademanda por parte nuestra para presentar por primera vez unas pruebas de un litigio que nos está durando 25 años". "Es posible que este juicio sea largo pero nos marchamos con la satisfacción que, como mínimo, los únicos que han estado presentando pruebas actuales, firmes y válidas desde el punto de vista de jurisdicción civil, hemos sido nosotros", ha sentenciado el director del Museu de Lleida.