Espai Cavallers, 15 años con mucho arte

La galería Espai Cavallers de Lleida despidió el año pasado celebrando el 15 aniversario de la inauguración de este equipamiento cultural. Y lo hizo abriendo doce meses de exposiciones y actividades culturales paralelas que tendrán como denominador común del número 15. Así, la galería de arte de la calle Cavallers exhibe hasta el próximo 23 de enero dos exposiciones que lanzan un claro guiño a este número. Por un lado, una selección de 15 óleos de los prestigiosos pintores barceloneses Josep y Ramon Moscardó (hermanos gemelos nacidos en 1953); y por otro, una muestra colectiva de Navidad con obras de quince artistas: Sònia Alins, Joan Artigas Planas, Jordi Bresolí, Lily Brik, Carlos Díaz, Mercè Humedas, Didier Lourenço, Gregorio y Pol Iglesias, Rebeca Muñoz, Perico Pastor, Marta Pruna, Magí Puig, Lourdes Ral, Alba Santacreu y Joaquín Ureña.

La responsable del Espai Cavallers, Roser Xandri, expresó esta semana a SEGRE su satisfacción por los quince años de la galería, ubicada en la planta baja de la Casa dels Artistes, un edificio municipal con talleres y despachos ocupados por profesionales del mundo de la cultura, el arte y la creatividad. El Espai Cavallers abrió sus puertas en noviembre de 2004 con una exposición dedicada a Albert Coma Estadella (1933-1991) y, en diciembre de aquel año, dedicó su segunda muestra a Benet Rossell (1937-2016), dos nombres capitales en la historia del arte leridano. “Quería que estos artistas definieran la línea a seguir: reivindicar los artistas más significativos de Lleida, al mismo tiempo que apostamos por artistas emergentes y sin cerrarnos tampoco a creadores del resto del país”, explicó Xandri.

“Comprar arte está hoy al alcance de todos los bolsillos”, asegura la directora de la galería

El Espai Cavallers también se ha convertido en un ‘superviviente’ del sector artístico privado en Lleida. Salvo comercios dedicados a la enmarcación que organizan exposiciones y salas de instituciones públicas, esta galería ya es un referente único después del cierre a finales de octubre de la histórica Terraferma. “Cada vez que cierra una galería me sabe muy mal, es un pena para la ciudad”, comentó Xandri, que reconoce que “la crisis económica está haciendo mucho daño al sector de la cultura y el arte”. Sin embargo, añadió que “la compra de arte está al alcance de todos los bolsillos; de hecho tenemos piezas originales desde 40 euros”, y reclamó al público que pierda el miedo a entrar a una galería.