'The Best On', evento en el aire

El Teatre de la Llotja de Lleida acogió el pasado 16 de noviembre la séptima edición del concurso internacional de danza urbana The Best On. Sin embargo, podría ser la última a pesar de repetirse un año más el éxito de público y de participación, con más de 200 bailarines y profesionales. Esto es lo que teme la organizadora de este evento, la escuela leridana de baile Dancescape, ante los posibles recortes presupuestarios por parte de la Paeria. El director del centro, Xavier Blanco, explicó ayer a SEGRE que están pendientes en los próximos días de una reunión con el concejal del área de Cultura, Jaume Rutllant, aunque “los rumores que hemos oído de que podrían recortar a la mitad la subvención haría inasumible organizar el concurso”. Blanco comentó que la aportación principal del ayuntamiento es de 6.000 euros, además del alquiler de la Llotja. “El primer premio del concurso ya es de 6.000 euros; el resto de premios en metálico así como toda la organización, logística, jurado internacional... corre a cargo nuestro”, recordó Blanco sobre un certamen que se ha convertido en un referente en España e incluso a nivel europeo. “A la Paeria le sale muy barato un evento al que asiste gente de todas partes”, añadió el responsable de Dancescape, que tiene claro que “si la colaboración municipal acaba siendo de 3.000 euros, lo lógico sería llevar el concurso a otra ciudad”. En este sentido, Blanco criticó que “la danza en Lleida está muy mal, sin residencias públicas para bailarines, sin apenas programación en el Día Mundial de la danza, sin ninguna fórmula cultural pública de apoyo a este género escénico...”. “Si el objetivo cultural es ser cada vez más provincianos, lo están consiguiendo”, lamentó Blanco.

Un proyecto de fin de semana que quería crecer por toda Lleida El concurso The Best On nació en 2013 de la mano de la escuela Dancescape. El éxito de convocatoria de compañías de baile españolas y europeas, que se tradujo en llenos de público en la Llotja, animó a los organizadores a plantear objetivos más ambiciosos, que ahora parecen irrealizables. “Queríamos generar un festival de danza urbana durante todo un fin de semana, que creciera con diferentes actividades por toda Lleida y que el concurso fuera el punto culminante”, explicó Xavier Blanco.