ESPECIAL
La división entre los envíos de libros y las compras aplazadas centra la jornada
El sector confía en que la celebración telemática incremente las ventas ‘on line’
Catalunya vivirá hoy una diada de Sant Jordi insólita marcada por el confinamiento, en una jornada sobre la que no existe una apuesta unitaria por parte de los distintos agentes sobre la consigna de regalar un libro y una rosa, como es tradición. Desde el inicio de la crisis sanitaria, fueron numerosas las propuestas realizadas desde los distintos gremios, asociaciones profesionales y empresas de libros y flores sobre cómo vivir esta tradicional fiesta, y algunas de estas sugerencias han sido contradictorias entre ellas.
Desde diversos sectores se ha animado a los clientes tanto a comprar y enviar libros y rosas –especialmente desde empresas multinacionales y con mayor capacidad de distribución–, mientras que otros sectores han llamado a comprar y esperar a recoger los encargos cuando pase la crisis para no contribuir a la propagación de la pandemia, petición especialmente reivindicada desde el comercio de proximidad. En cualquier caso, desde el sector se espera que la celebración telemática de la jornada incremente la venta on line de las librerías. El Gremi d’Editors y la Cambra del Llibre ‘saludaron’ recientemente “todas las iniciativas” en torno a esta jornada, pese a reivindicar que la celebración tradicional del día del libro está pospuesta para el 23 de julio, aunque sin saber cómo podrá llevarse a cabo. Por su parte, el Gremi de Llibreters impulsó las iniciativas Sense parades però sense parar y Llibres a l’aire para hacer un llamamiento a que los ciudadanos salgan hoy a sus balcones y ventanas, lean en voz alta y aplaudan. Eso sí, la fiesta se trasladará a internet con otras iniciativas como la recomendación de lecturas por parte de autores y bibliotecas, concursos on line promovidos desde múltiples ámbitos, juegos y propuestas para animar una jornada inaudita para todo el sector donde lo que menos importará, a diferencia de otros años, es si llueve o si cae en festivo.
Una experiencia casi inédita para las librerías centenarias La Llibreria Dalmases de Mollerussa cumplió el año pasado sus cien años y ésta será una de las pocas veces en su historia que no celebrará la Sant Jordi tal y como marca la tradición. Para evitar aglomeraciones durante la jornada, el establecimiento animó a sus clientes a comprar anticipadamente los libros a través de su página web y muchos han hecho caso. “Sí hemos notado un incremento de ventas en la web estos días y ahora estamos repartiendo por Mollerussa y municipios próximos a la capitla del Pla d’Urgell”, remarcó ayer la responsable de la librería, Núria Dalmases. Hay usuarios que han preferido reservarlo para evitar quedarse sin su libro deseado, ya que muchos proveedores no reparten o lo hacen con más lentitud de lo usual. Hoy jueves el establecimiento abrirá solo por la mañana, tal y como hacen otros establecimientos. “Tomaremos medidas para evitar la concentración de personas, por suerte tenemos una liberería grande”, remarcó Dalmases.