LITERATURA GALARDONES
La canadiense Anne Carson, 'Princesa de las Letras'
La poeta y ensayista canadiense Anne Carson, autora de una obra innovadora en la que la vitalidad del pensamiento clásico le sirve como mapa para dilucidar las complejidades del momento actual, se convirtió ayer en la novena mujer, la tercera consecutiva (tras Siri Hustvedt y Fred Vargas), en obtener el Premio Princesa de Asturias de las Letras, dotado con 50.000 euros. Según el jurado, que concedió el galardón tras una reunión telemática por el coronavirus, Carson (Toronto, 1950) “ha alcanzado en los distintos ámbitos de su escritura cotas de intensidad y solvencia intelectual que la sitúan entre los escritores más destacados del presente”.
Una de las grandes favoritas al Nobel de Literatura 2019, la ensayista, traductora, poeta y profesora llegó al mundo de la cultura clásica a partir de una edición bilingüe de los poemas de Safo, que encontró en una librería y que cambió para siempre su vida. Especialista también en literatura comparada, antropología, historia y publicidad, Carson es, a juicio de la crítica, una de las escritoras más exquisitas y eruditas de la literatura contemporánea.
La entrega de los premios Princesa de Asturias está prevista para el 16 de octubre en Oviedo
Entre su obra, destaca la novela en verso Autobiography of Red (1998). Desde que en 2007 la editorial Pretextos publicara en castellano Hombres en sus horas libres (2001), el auge de esta poeta profundamente reservada, solitaria y áspera –como la han calificado algunos– no dejó de crecer. A esta obra le siguió el ensayo La belleza del marido (2002), otra de sus obras más conocidas junto a Albertine (2014), en la que abrió un nuevo camino para que los lectores de Marcel Proust “revisen” el mundo de En busca del tiempo perdido.
Editores de sellos como Pre-Textos, El Vaso Roto o Lumen, responsables de la publicación en el estado de su obra, celebraron el galardón a una autora “poco conocida” en España y que hasta ahora no contaba con grandes ventas de sus libros. “Nos las hemos visto y deseado para vender sus libros, pero ahora nos llaman todos los distribuidores”, reconocieron encantados.