ACTIVIDADES CORONAVIRUS
Un compañía de teatro de Lleida pierde un bolo en Barcelona por venir del Segrià
Compañías teatrales leridanas contra el miedo, después de que Xip Xap pierda un bolo en Barcelona por venir del Segrià || Llamamiento del festival Esbaiola't para salvar la edición de este año
Desde el reconfinamiento oficial del Segrià el pasado sábado por el coronavirus, el sector teatral leridano vive con extrema preocupación la posible estigmatización de las compañías simplemente por el hecho de ser de Lleida. Xip Xap fue la primera afectada. “Apenas media hora después de anunciarse el confinamiento del Segrià, nos llamaron del ayuntamiento de una localidad de Barcelona donde teníamos que actuar el domingo para pedirnos por favor que no viniéramos”, lamentó Víctor Polo, uno de los responsables de la histórica compañía de teatro familiar de Lleida. Polo destacó que “a pesar de todo querían pagarnos el bolo, pero nosotros lo que queremos es trabajar”. Desde la compañía Campi Qui Pugui, con sede en Castellserà (en el Urgell), también reconocieron haber recibido llamadas de ayuntamientos de Girona y Barcelona donde tiene que actuar preocupados por si pueden actuar. “Hay mucha desinformación y miedo, todos tienen que saber que la movilidad no está prohibida por razones laborales, que es lo que hacemos nosotros, ir a trabajar con todas las medidas de seguridad posibles, pero solo que digas que eres una compañía de Lleida, sea de la comarca que sea, ya infunde miedo”, criticó Cristina Garcia, una de las componentes de Campi Qui Pugui. También se manifestó en este sentido el actor y dramaturgo Ramon Molins, de Zum Zum Teatre: “Estamos preocupados por esta primera reacción de miedo que afectó a Xip Xap y que tendría que cortarse lo más pronto posible. Hay que decir a todo el mundo que el confinamiento no impide salir a trabajar y evitar esta etiqueta de que si somos de Lleida parece como si estuviéramos apestados”. Molins reconoció que “es normal que haya miedo”, pero reclamó “más rigor y prudencia porque trabajamos con las más estrictas medidas de seguridad”. En este sentido, todas las compañías lamentan que “somos un colectivo muy vulnerable, que hemos vivido unos meses de confinamiento muy duros, sin poder trabajar, y que ahora que comenzamos a levantar un poco la cabeza no se nos puede estigmatizar”.
Tras anularse la Fira de Titelles de Lleida de ‘emergencia’ que tenía que celebrarse mañana en la Llotja, ayer fue la compañía La Baldufa la que lanzó un SOS por el festival Esbaiola’t, que organizan cada año en Esterri d’Àneu, previsto del 16 al 19 de julio y que ya había vendido un 50% de las entradas. El certamen anunció la devolución del importe de las mismas al público del Segrià que las hubiera adquirido y no pueda viajar hasta la capital aneuenca, en un proceso que durará hasta mañana por la noche. Cabe recordar que en el Esbaiola’t suelen participar de forma habitual cada año numerosas familias procedentes de Lleida y el Segrià. De forma paralela a este retorno de entradas, la organización anima a espectadores del resto del país que no estén confinados a comprar entradas y disfrutar del festival. El próximo fin de semana se valorará tanto la cantidad de entradas retornadas como las posibles nuevas localidad adquiridas para tomar una decisión final sobre la celebración del Esbaiola’t 2020. Desde la compañía avanzaron que “si superamos el 45% de entradas vendidas, seguramente podremos celebrar el festival”.
Incertidumbre en Lleida por el Sant Jordi de verano, el 23 de julio Faltan solo 16 días para celebrar la fiesta del libro alternativa de este 2020, el denominado Sant Jordi de verano el próximo día 23, un evento que, desde el reconfinamiento del Segrià el pasado sábado, el sector de las librerías y editoriales en Lleida contempla con muchísima incertidumbre. Aunque aún no está confirmado desde la Paeria, SEGRE avanzó que la idea era concentrar las paradas exclusivas de librerías y editoriales locales en la zona del Pati de les Comèdies. El Gremi de Llibreters está pendiente de la evolución día a día de la pandemia y el confinamiento para decidir si Lleida podrá celebrar la diada con normalidad. Precisamente, ayer la Federación de Gremios de Editores de España dio luz verde a descuentos de hasta un 10% en las ventas para este Día del Libro especial del 23 de julio.