“Voluntad y respeto, claves para que las culturas se entiendan”

Trece años después de su novela de debut, El pont dels jueus, el escritor y periodista Martí Gironell retoma la historia donde la dejó y publica Paraula de jueu (Columna). Un libro que se sitúa en el siglo XIV y arranca con el encargo de la villa real de Besalú que recibió, en la anterior novela, Pere Baró de reconstruir el puente que 300 años antes había levantado el constructor Prim Llombard. Además de la obra urbanística, la novela retrata la rivalidad entre judíos y cristianos y aborda el poder de la palabra escrita. En este sentido, otro de los aspectos en los que se basa el libro es en la reflexión sobre el entendimiento entre las diferentes culturas. Gironell tiene claro que “voluntad y respeto son dos aspectos clave para que las culturas diferentes se entiendan”. Tanto en el siglo XIV, cuando sucede la novela, como en la actualidad. Por ello, la obra profundiza en la “división entre las culturas cristiana y judía, dos comunidades, dos religiones y dos maneras de ver y concebir la vida, que para entenderse deben tratarse con amor y respeto”. La historia está protagonizada por Kim, un joven judío descendiente de los Llombard, y Ester, una chica cristiana que trabaja entre el Hospital de l’Almoina de Barcelona y la judería. Esta ha sido una historia que ha ido acompañando al autor durante todos estos años, pese a que entre una y otra ha publicado otros títulos, como la galardonada La força d’un destí, Premi Ramon Llull 2018. Más de una década en la que siempre ha procurado mantener el contacto con sus lectores.