“Entregamos las obras de arte con disgusto e indignación”

La consellera de Cultura, Àngels Ponsa, aseguró ayer que la entrega de 111 obras de arte originarias de la Franja del Museu de Lleida al de Barbastro se hace “en contra de nuestra voluntad, con indignación y un disgusto profundo”. El Consorci del Museu –que ya ha enviado 28 piezas que estaban en depósito– se compromete al traslado porque no había otra alternativa ante las “amenazas civiles, penales y económicas”, que pudieron verse en el reciente litigio por las 44 obras de arte de Sigena, en el que los exconsellers Vila y Puig siguen imputados por desobediencia.

La consellera calificó de “política” la justicia que sentenció entregar el arte y lamentó que no hubiera tenido en cuenta el arte y la protección del patrimonio a la hora de dictar que los bienes deben enviarse a Barbastro, aunque se trate de una ejecución provisional de una sentencia que no es firme y tiene recorrido judicial. De hecho, añadió que no los descatalogarán hasta que se llegue a los tribunales europeos.

Ponsa se resignó a esperar en un futuro si les dan la razón a las alegaciones presentadas y los recursos en instancias judiciales superiores. También confirmó que los días 5 y 10 de marzo se enviará el conjunto de 83 piezas que falta por trasladar al Museo Diocesano de Barbastro, como avanzó ayer SEGRE.

Por otro lado, explicó que el lunes habrá una reunión del Consorci con la Plataforma d’Entitats Culturals y el Cercle d’Amics del Museu de Lleida para “dar la cara” sobre todo lo que está pasando. Y en unos pocos días ofrecerá una rueda de prensa en el Museu para hablar del futuro del equipamiento.

Proyectos vitales en La Seu Àngels Ponsa visitó ayer La Seu d’Urgell para conocer de cerca proyectos culturales vitales de la ciudad, desde el yacimiento medieval en el antiguo patio de Les Monges y las obras de renovación de la Biblioteca Sant Agustí hasta la candidatura de España, Andorra y Francia a Patrimonio Mundial de la Unesco de testimonios materiales de la construcción del Coprincipat (entre ellos la catedral de La Seu), que el mes pasado entró en las listas indicativas de los tres países. En Andorra, tenía previsto reunirse con las ministras de Cultura y de Asuntos Exteriores.