PATRIMONIO LITIGIO
Sant Llorenç pierde una Mare de Déu
Los fieles que acudieron ayer por la tarde a misa en Sant Llorenç descubrieron con tristeza que había ‘desaparecido’ la Mare de Déu de Saidí, la emblemática escultura de piedra policromada del siglo XIV que hacía ochenta años que estaba al culto en esta iglesia de Lleida. Solo quedaba a la vista la peana vacía, en el lado derecho del presbiterio.
Técnicos de la empresa SIT Spain de transporte de obras de arte trasladaron la escultura por la mañana hasta el Museu de Lleida para ‘empaquetarla’ para el viaje que la llevará mañana hasta el Museo Diocesano de Barbastro. No fue lo único que se llevaron del templo.
En la lista de los 111 bienes reclamados por la diócesis aragonesa también figuraba otra escultura de piedra policromada de Saidí, un Sant Miquel de principios del XV, que hasta ahora lucía en una de las columnas de la nave central de Sant Llorenç. El rector de la parroquia, Francesc Xavier Jauset, reconoció que “es un día triste, después de tantos años al culto, pero imagino que en Barbastro ya las están esperando con candeletas, quizás para arrinconarlas en un museo”.
Jauset añadió que “estudiaremos si en este espacio vacío colocamos la Mare de Déu de l’Esperança, que ahora está junto al altar de Sant Llúcia, u otra pieza adecuada que pueda ceder el Museu”.
Por otro lado, el delegado de patrimonio del obispado de Huesca anunció ayer que, tras conocer el proceso de Barbastro, iniciarán próximamente el procedimiento legal para reclamar al Museu el frontal de Berbegal, la tabla de Peralta de Alcofea y la fachada de El Tormillo que luce en la iglesia de Sant Martí de Lleida.
El Consorci agotará la vía judicial hasta Europa por el arte
Después de que el juzgado de Barbastro desestimara el pasado viernes todas las alegaciones y recursos de oposición a la entrega provisional de las 111 obras del Museu de Lleida –de hecho, aquel mismo día ya se trasladaron una cuarentena de piezas en camión–, el plenario de Consorci reafirmó ayer en una reunión telemática “el compromiso de agotar todas las instancias judiciales”, nacionales e internacionales, para defender el arte en litigio con Aragón y siguió denunciando tanto “la judicialización del patrimonio de la Franja custodiado en el Museu de Lleida” como “la indefensión jurídica” provocada por las últimas resoluciones. Generalitat, Paeria, Diputación, consell del Segrià y obispado agradecieron el apoyo al Museu de los ciudadanos, la sociedad civil y los colectivos profesionales y redes de museos de Catalunya.