Xavier Baró reúne en un libro las letras de 23 años de música

El cantautor de Almacelles Xavier Baró confiesa que “no concibo mis canciones sin música, pero muchas pueden funcionar perfectamente sin ella”. Por ello, ha acabado haciendo caso a la gente que siempre le había sugerido de plasmar sus letras en papel.

Dicho y hecho, Baró acaba de publicar Les cançons de l’envelat (Pagès Editors), un volumen en el que ha reunido las letras de la docena de discos de sus más de dos décadas de trayectoria como cantautor. Un ciclo musical que arrancó en 1998 con el álbum La cançó de l’udol y que ahora ha querido cerrar con los temas de La veu de la muntanya, disco que estrenó el pasado septiembre, en plena ‘lucha’ contra la pandemia y la cancelación de conciertos.

“Creo que las letras de las canciones tienen una forma poética, literaria”, asegura el cantautor leridano sobre un libro dirigido, primero, evidentemente a sus fervientes seguidores, pero “también a amantes de la literatura porque las letras tienen un valor poético”. .

El libro desvela más sorpresas para el lector, puesto que incluye hasta 16 canciones inéditas, que no han formado parte de ninguno de sus discos, aunque algunas las interpreta en directo. Baró comenta al respecto que “preparar un disco es un trabajo muy intenso en torno a un concepto determinado, que puede surgir sobre la marcha y que acaba provocando que tengas que elegir entre los temas que has escrito.

En una grabación siempre has de ordenar este rompecabezas, lo que significa dejar fuera del disco algunas canciones”. Por eso, incluirlas ahora en Les cançons de l’envelat es como un regalo, acompañado también de dibujos, manuscritos, esbozos..

Un volumen que muestra la evolución estilística de un autor que se siente como “un nómada que va componiendo canciones por el camino, fruto de la experiencia vital”. Un libro que también desvela cuándo y cómo, después de una actuación en Vigo, decidió dejar de lado una trayectoria musical que había comenzado a principios de los 80 en Madrid con canciones en castellano con el grupo Primavera Negra.

“Estaba como dentro de un río que me iba llevando hacia un lugar al que no quería ir, hasta que aquel día de 1996 en Vigo se me apareció la musa catalana y me decidí por una carrera en solitario para expresar mis ideas, un juglar con las raíces en el sitio al que pertenezco”..