La Paeria pide al Govern más apoyo al patrimonio de Lleida

El alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, mantuvo ayer una primera reunión oficial con la nueva consellera de Cultura, Natàlia Garriga, en la que le mostró la voluntad de la Paeria de “articular un sistema de gestión conjunta para dar sentido, eficacia y eficiencia a los activos culturales y patrimoniales de Lleida”.

Pueyo encabezó una delegación de la Paeria, junto con la 2ª teniende de alcalde, Jordina Freixanet, y el concejal de Cultura, Jaume Rutllant, que se entrevistó en la conselleria de Cultura en Barcelona con la nueva titular del departamento, Natàlia Garriga, que a finales de mayo sustituyó en el cargo a la leridana Àngels Ponsa. En su cuenta de Twitter, Pueyo explicó que “queremos impulsar el sector cultural como motor de la reconstrucción”.

Por su parte, Rutllant explicó que durante el encuentro se abordaron diferentes cuestiones del ámbito cultural en Lleida: el despliegue del plan de bibliotecas, la gestión de los museos y del Turó de la Seu Vella (la Generalitat ya forma parte del patronato), las obras del futuro Museu d’Art Morera, el ‘clúster’ del teatro familiar, así como los equipamientos de la ciudad relacionados con el mundo audiovisual.

Apuestan por un Sant Jordi 2022 ‘descentralizado’ La Paeria apuesta de cara al Sant Jordi del año que viene por una diada ‘descentralizada’, manteniendo y, si cabe, ampliando con el espacio de paradas de librerías en la avenida Francesc Macià y rambla Ferran, pero buscando también otras zonas por la ciudad para dar cabida y actividades a diferentes asociaciones de comerciantes.

Esta fue la propuesta surgida ayer en un encuentro telemático en el que participaron los concejales de Cultura, Jaume Rutllant, y de Comercio, Marta Gispert, con representantes de asociaciones de libreros, editores y floristerías. También se planteó complementar la actividad de las paradas con otras de entidades y asociaciones culturales –de acuerdo con las restricciones vigentes en aquel momento– para hacer de la diada una jornada aún más festiva. Desde las librerías se propuso dinamizar la semana entera de Sant Jordi.