Perico Pastor retrata su vuelta a la vida

Perico Pastor tenía previsto inaugurar ayer por la tarde en La GaLeRia de Sant Cugat su exposición más ‘vital’. Unas setenta pinturas en las que el artista de La Seu d’Urgell ha pintado nada más y nada menos que su “resurrección”, después de un infarto que le dejó cinco semanas en coma. “Estoy muy recuperado, aunque mas delgado, pero muy contento.

¡Ha sido una auténtica resurrección”, explicó ayer a SEGRE con satisfacción unas horas antes de presentar en sociedad esta colección de dibujos –algunos de los cuales pueden verse en esta página–, que ha pintado en los últimos meses durante su recuperación en el Institut Guttmann de Barcelona. Este episodio, que el artista ha mantenido hasta ahora con total discreción, ocurrió hace ahora un año, cuando sufrió un infarto mientras practicaba remo en la Barceloneta. “La verdad es que si no hubiera estado acompañado en aquel momento y si la ambulancia no hubiera llegado rápidamente, creo que no lo hubiera contado”, confesó Pastor.

Estuvo ingresado en el hospital de Sant Pau en coma durante cinco semanas, pero nada más ‘despertar’, ya se hizo con una libreta y un lápiz para seguir dibujando y pintando. “Siempre he disfrutado mucho de la vida, y ahora aún lo estoy haciendo más”, comentó el artista, que añade al respecto que “con estas cosa te das cuenta de lo frágil que es la vida y que lo más fundamental es el amor que te da la gente”. El pasado mes de enero ingresó en el Institut Guttmann para su recuperación y entonces decidió retratar todo este proceso de meses de ‘vuelta a la vida’.

El resultado es una colección de unas setenta pinturas que, bajo el significativo título de Despertar, se exhibirán hasta el 7 de enero en la galería de arte de Sant Cugat. El artista reconoce que ha adaptado su habitual técnica pictórica al ambiente sanitario, “con unos colores dominantes de gamas azules, turquesas y ocres, menos luminosos que en trabajos anteriores pero que creo que lucen igual de bien”. Un trabajo en sintonía con los dibujos que creó durante el confinamiento provocado por la pandemia y que comenzó a enviar cada día a través del móvil a amigos y personas que conocía del mundo sanitario como agradecimiento por su labor contra la Covid.

La acción acabó ampliándose a personal de la hostelería, como ‘compensación’ por el cierre de los locales, y sumó hasta 750 contactos.Y una muestra de su buen estado de forma es que ya está ultimando también su ya tradicional presencia navideña en la galería Indecor de Lleida. “¡Antes dejaría de comer el pavo de Navidad que no venir a la exposición de Piti!, exclamó en alusión al responsable de Indecor.