Campi Qui Pugui, en el TNC

La compañía de teatro leridana Campi Qui Pugui se estrena esta tarde en el Teatre Nacional de Catalunya con la primera sesión abierta al público general de su obra Camí a l’escola que, desde el miércoles, solo se ofrecía para las escuelas. La sesión de esta tarde a las 17 horas tiene las entradas prácticamente agotadas. La obra se podrá ver cada sábado a las 17h y domingo a las 12h hasta el 19 de diciembre en la Sala Tallers del teatro barcelonés. Los miércoles, jueves y viernes la compañía hará funciones dirigidas a las escuelas.

Las entradas ya están a la venta con un precio de 10€ para los adultos y 8€ para los niños. Alicia Buil, Cristina García, Aitana Gilart, Jordi Pedrós, Marc Cartanyà y Erik Varea son los actores que aparecen en la obra, que es sin texto y de una duración de 55 minutos.Camí a l’escola, estrenada el 2019, se empezó a gestar en 2017 y está inspirada en el documental francés Sur le chemin de l’école, que muestra cuatro relatos de niños de diferentes partes del mundo en su recorrido a la escuela. La obra ‘‘ha intentado extraer la esencia de cada viaje’’ para plasmarlo en la interpretación, según explicó a este diario la directora, Rosa Díaz, que también aseguró que el objetivo final es transmitir a los niños que deben valorar el hecho de poder acudir a las escuelas sin peligro.El espectáculo, que el próximo 15 de diciembre cumplirá su función número 100, ha recorrido numerosos teatros de España y ha recibido diferentes reconocimientos como el Premi de la Crítica al mejor espectáculo familiar de la temporada y el Premio FETEN por su puesta en escena.

También ha estado nominado a los premios Butaca del Teatre y candidato a los Premios MAX de Artes Escénicas.

Un relato sobre el duro camino de muchos niños hacia la escuelaCamí a l’escola relata la historia de tres hermanas que se enfrentan diariamente a obstáculos y peligros para llegar a la escuela. La trama representa la realidad de muchos niños y niñas del mundo, que deben superar diversas amenazas y recorrer muchos kilómetros para poder llegar a su centro educativo, una situación muy diferente a la que se vive en los países considerados occidentales.La obra pretende concienciar tanto a los adultos como a los niños sobre la importancia de valorar el acceso a la educación que disfruta la Europa Occidental.