Aragón busca ahora los restos de Peronella, casada en la Seu Vella

Desde 2007, la Seu Vella acoge cada año la recreación de las bodas reales entre Peronella de Aragón y el conde de Barcelona Ramon Berenguer IV, que se celebraron en agosto de 1150. La última fiesta se celebró el pasado mes de mayo (en la foto, la actriz que encarnó a Peronella). De aquella unión matrimonial surgió la monarquía unificada del reino de Aragón.

De Peronella, que se casó en Lleida apenas con 14 años y falleció a los 37 tras dar a luz a cinco hijos, se ignora a ciencia cierta dónde reposan sus restos mortales, aunque se cree que están en la catedral de Barcelona. Al menos, así lo supone el gobierno de Aragón que, según publicó ayer El País, ha pedido al arzobispo de Barcelona, el turolense Juan José Omella, llevar a cabo pruebas de ADN de un sepulcro de la catedral, que oficialmente contiene los restos de la condesa Almodís de la Marca (1020-1071), esposa del conde Ramon Berenguer I. El ejecutivo de Javier Lambán sospecha que la identificación del sepulcro es errónea, basándose en que, ya hace dos décadas, el entonces arquitecto de la catedral, Joan Bassegoda, publicó un artículo en el que defendía que el cuerpo de Peronella se hallaba en el transepto del edificio, después de que el archivero del templo en el siglo XVI hubiera confundido los nombres.

Eso sí, desde Aragón aseguran que no se reclamará el traslado de los restos de la reina en el que caso de que se confirmara que es Peronella. Por otro lado, la Plataforma Sijena sí pidió al presidente Lambán que proponga al predidente de la Generalitat –en su encuentro previsto el mes que viene– la “devolución amistosa” de las pinturas murales del MNAC originarias del monasterio oscense y acordar también una red de panteones reales (con Poblet, Santes Creus y Sigena, entre otros) para ser declarada Patrimonio de la Unesco.