El Monasterio de Sigena dispondrá de nuevos espacios para exponer más obras procedentes del Museo de Lleida
Los sarcófagos de las monjas expuestos desde hace cinco años en los dormitorios se han cubierto ahora con vitrinas para protegerlos
El gobierno aragonés está rehabilitando nuevos espacios en el Monasterio de Sigena para poder ampliar el espacio expositivo que acogerá las obras procedentes del Museo de Lleida. Actualmente sólo se exponen algunas en los dormitorios del monasterio, un espacio inaugurado en 2017, cuando llegaron las piezas provenientes de Lleida. En este espacio destacan los tres sarcófagos de las monjas de Sigena que ahora se han cubierto con vitrinas para protegerlos. El presidente del gobierno de Aragón, Javier Lambán, espera que las obras estén terminadas en marzo del año que viene, cuando se celebrará el centenario del reconocimiento del Monasterio como monumento nacional. Lambán también "desea" que las pinturas murales reclamadas judicialmente al MNAC puedan "volver" al monasterio "pronto".
Lambán ha visitado este viernes las obras de rehabilitación que se están haciendo en el Monasterio de Sigena y ha explicado que el departamento de Educación y Cultura del gobierno aragonés invertirá 1,8 millones de euros provenientes de fondo europeos. Estos trabajos, que se ejecutarán entre 2022 y 2023, ha dicho, permitirán acabar las obras en el claustro y restaurar las naves de los antiguos dormitorios con el fin de ampliar la actual zona expositiva.
Con esta intervención, el gobierno aragonés también quiere adecuar una zona que se dedicará a almacén y a taller de restauración, con vistas a la posible llegada de las pinturas murales expuestas al Museo Nacional de Arte de Catalunya (MNAC), pendiente de una resolución del Tribunal Supremo.
Los técnicos encargados de los trabajos de mejora han explicado que el proceso de intervención en el Monasterio de Sigena empezó con el drenaje de las aguas subterráneas y el establecimiento de los criterios de intervención de un monasterio que estaba "en escombros" y que ahora hay que conseguir que las condiciones del espacio sea adecuados para acoger obras de arte. Por eso, han añadido, se colocarán también vitrinas "allí donde el proyecto museográfico lo necesite" para que cada pieza se pueda exponer velando por su conservación. Precisamente, los sarcófagos de las monjas de Sigena expuestos en los dormitorios, se han cubierto más de cuatro años después de la suya llegara con vitrinas para su mejor conservación.
Lambán se muestra convencido que las piezas procedentes del Museo de Lleida se podrán exponer en los nuevos espacios en 2022 coincidiendo con el centenario del Monasterio como monumento nacional y desea que también se puedan exponer "en breve" las pinturas del MNAC en la sala capitular del Monasterio, "de donde nunca tuvieron que salir", ha dicho. Lambán ha asegurado que el espacio reúne ya las condiciones por si las pinturas llegaran mañana.