Cervera recupera la Passió

La Passió de Cervera conquistó ayer de nuevo el escenario después de dos años de ausencias a causa de la pandemia. Doscientos espectadores acudieron a la primera representación de la temporada, que presenta varias novedades, como una nueva cantera de actores, 45 minutos menos de duración y dos pausas en total.

Cervera recuperó ayer la joya más viva de su patrimonio cultural, la Passió, tras dos años sin representaciones. La pandemia mundial de Covid se declaró en 2020 cuando estaban a punto de inciar una nueva puesta en escena.

Al finalizar, ayer, la primera de las representaciones de este año de Cristo, Misterio de Pasión, los actores aseguraron que este lapso ha sido “duro y difícil”. Y lo corroboró el presidente el patronato de la Passió, Xavier Cañabate. Tras estos dos años de pandemia, buena parte del cuerpo de actores anterior ya no han regresado a las representaciones.

Algunos de ellos han fallecido y otros han aprovechado para dar paso a las nuevas generaciones. obra. “Ha sido una suerte poder contar con la gran cantera de actores jóvenes que tenemos en el Grup Escènic del Patronat de la Passió”, dijo el presidente, y manifestó que los dos años de paro han servido para renovar buena parte de los más de 200 actores y de los papeles presentes en la obra.

Por todo ello, al finalizar la representación de ayer, cuando se abrió el escenario al público, los actores vivieron momentos muy emotivos. Entre otras cosas, habían conseguido levantar el proyecto de nuevo de modo que se fundieron en abrazos. Esta obra se representa en la capital de la Segarra desde hace cinco siglos.Los dos años de paro también han servido para remodelar el montaje, reducido en 45 minutos y que se representa ahora en tres bloques.

La obra comienza a las 10 de la mañana y hace pausas a las 11.00 y a las 12.30. El objetivo es hacer una obra con más ritmo, más ágil y más actual: “La gente ya no aguanta pasarse medio día sentada en una butaca”. Los diálogos son menos retóricos y varias escenografías se han eliminado.

Se ha puesto el acento en recuperar el cuerpo de canto original y el de danza del cuadro de Herodes, que ahora inicia su actuación entre el público de la sala.

Más público familiar y menos grupos entre los espectadores

El presidente el patronato de la Passió, Xavier Cañabate, reconoció que la primera actuación, que solía ser una de las que contaban con más público, solo consiguió ocupar 200 butacas. Además de un autocar con 50 espectadores de la Conca de Barberà, el resto era público familiar.

Según el presidente, cada vez son menos los grupos que viajan para ver la obra y, contrariamente, la sala consigue cada vez más reservas de público familiar que llega de toda Catalunya, en especial, de Barcelona y de Lleida. Otra de las curiosidades es que el público ya ha reservado plaza para las últimas escenificaciones. En total la obra mantiene 6 representaciones, además de ayer, los días 3, 9, 15, 24 y 30 de abril.

Las próximas actuaciones coincidirán con el Festival de Pasqua de Cervera dedicado a la música clásica catalana entre el 7 y el 16 de abril. En la Passió de Cervera participan más de 200 actores. Se trata de un proyecto que, de forma directa o indirecta, cuenta con la presencia de la práctica totalidad de las familias de la ciudad y la comarca.

Hay que lamentar que este año, y tras dos años sin llevarse a cabo, se ha anulado por falta de presupuesto la escenificación única de la obra original que se llevaba a cabo en la parroquia gótica de Santa Maria del Coll de les Sabines.