LITERATURA NOVEDAD
“La leyenda de Sant Jordi oculta hechos reales”
El escritor de Artesa de Segre Jordi Nogués publica 'La rosa i la creu' || Novela histórica
El escritor e historiador leridano Jordi Nogués (Artesa de Segre, 1968) siempre tiene en mente una frase: “Detrás de toda leyenda hay hechos reales”. El lema ha marcado su último libro, La rosa i la creu (Rosa dels Vents), en el que se ha sumergido tras las pistas históricas de la leyenda catalana de Sant Jordi en el Montblanc del siglo XIV. “He encontrado algunas que me han conducido a una conclusión: la de una noble secuestrada y un caballero que acudió a rescatarla”, explica este escritor de novela histórica, un género con no demasiada buena fama entre sus colegas académicos.
Nogués se defiende: “Muchos compañeros historiadores nos critican diciendo que nos estamos cargando la Historia. Pero yo creo que al 90% de los lectores les resulta muy pesado leer libros de Historia y, supongo, no todos los autores de novela histórica describen los hechos con la pulcritud con la que yo trato de abordarlos en mis obras”. Afincado desde adolescente en tierras tarraconenses –ahora hace unos años que vive en Valls–, Nogués mantiene sus lazos con su Lleida natal.
De hecho, durante más de una década fue el director del Parc Temàtic de l’Oli en Les Borges Blanques. “Tengo ideas para una novela ambientada en Ponent, pero ahora tengo la mirada puesta en Tarragona, sobre todo la vinculada al mundo romano”, revela. Después de debutar hace una década con obras de fantasía histórica, en 2016 saltó a la novela histórica con Colosseum (ambientada en el imperio romano) y siguió en 2019 con Naumaquia (con gladiadores de protagonistas).
De ‘regreso’ a Catalunya, en 2019 publicó L’espasa i la llavor, en la que revivió la fundación y la construcción del monasterio de Poblet en el siglo XII. Ahora, en La rosa i la creu desvela “la verdad oculta tras la leyenda de Sant Jordi” y aprovecha también para recrear la vida en el Montblanc de la Catalunya Nova del XIV, con el trasfondo de la guerra entre Pedro el Cruel y Enrique de Trastámara.