PATRIMONIO UNIVERSITAT DE LLEIDA
Prueba piloto para disfrutar de la Seu Vella con imágenes 3D
Visita técnica en el estreno del simposio dedicado a la Porta dels Apòstols
La treintena de participantes ayer en el primer simposio de la Càtedra Turó de la Seu Vella de la Universitat de Lleida disfrutaron del monumento más emblemático de la capital del Segrià como nunca antes se había podido ver. Equipados con unas gafas especiales, casi pudieron ‘tocar’ los relieves escultóricos del tímpano de la Porta dels Apòstols y admirar muy de cerca los restos de policromía de la época gótica. Fue una prueba piloto de estas gafas con imágenes en 3D, en un proyecto materializado por la empresa leridana Invenlon, con fotografías captadas con un dron y montadas en 360º en el visor.
El director del Turó, Joan Baigol, avanzó que “en el plan director previsto para el año que viene ya se contemplarán todas las posibilidades tecnológicas para facilitar las visitas y poner en valor todos los aspectos de este edificio monumental”. La Porta dels Apòstols fue la protagonista durante toda la jornada del primer simposio de la cátedra. Su directora, la profesora de la UdL Eva Martín, y el vicerrector de Cultura de la universidad leridana, Joan Josep Busqueta, destacaron la elección de esta entrada emblemática de la Seu Vella como protagonista de este simposio “porque ha sido recientemente objeto de la restauración más importante en el monumento, y también para contribuir así a la difusión del conjunto patrimonial desde la mirada científica de la UdL”.
Historiadores como Francesca Español, Francesc Fité, Montserrat Macià, Carmen Berlabé, Alberto Velasco, entre otros, participaron en la primera jornada del encuentro, que culminará hoy jueves.
Aniversario del ‘sello’ de la Unesco
Justo ayer se cumplieron 50 años de la aprobación por parte de la Unesco de la Convención de Patrimonio Mundial, la ‘exclusiva’ lista a la que también aspira el Turó de la Seu Vella. El historiador Pep Tort –exdirector del Turó– intervino en el simposio como presidente de los Amics de la Unesco en Lleida para recordar este aniversario y destacar los criterios cambiantes, cada vez más complejos, de este organismo internacional desde 1972 a la hora de poder inscribir conjuntos patrimoniales: “En el siglo XXI, ya no solo es conseguir una simple etiqueta”.