Francesco Tristano: «El concierto de mañana será una experiencia inmersiva»

Francesco Tristano (Luxemburgo,1981) actúa mañana en el Auditori Enric Granados con un planteamiento artístico que muestra una mentalidad abierta y una actitud experimental al combinar una formación clásica formal con conocimientos pioneros de música electrónica. Galardonado internacionalmente, ha publicado una docena de álbumes. También ha fundado su propio grupo de cámara, los New Bach Players.

¿Cómo se definiría? No suelo definirme en palabras, sino en la música misma. Mi música se define por los álbumes que produzco. Cada álbum cuenta una historia, y todos los álbumes que he hecho suman mi camino en la música, a la espera de que llegue el próximo…

¿Qué siente cuando toca el piano? Intento tener la mente blanca, o sea sin imágenes predefinidas. Es un momento muy especial, de excepción. La idea es disfrutar y sentirme libre. Las sensaciones pueden variar mucho, entre notar la temperatura, o la comunicación con el público, o ambos a la vez.

Bach es su compositor favorito… Desde siempre. Pero cumplimenta su repertorio con músicos menos conocidos: Rameau, Bull, Gibbons…

¿Entre sus objetivos se plantea una culturización de sus espectadores? No necesariamente. Es que hay muchos compositores marginales que se han quedado olvidados. El canon a veces no es justo, ni justificable. A mí me gusta buscar estas obras bellas escondidas y compartirlas con el público. Si sirve para ampliar perspectiva y conocimientos a la gente, pues mucho mejor.

¿Qué pianistas le han influido más? Mis dos grandes inspiraciones del siglo XX son Glenn Gould y Friedrich Gulda.

Esa vertiente experimental suya de relación con la electrónica, ¿es un recurso para desfogarse de la rigidez del discurso clásico? Puede ser. El hecho es que la música electrónica es la última música desarrollada por el ser humano y me gusta participar y aportar lo que pueda. Lo que pasa es que soy pianista y ahí entra el piano acústico en el discurso de la música electrónica.

Tuvimos la ocasión de verle actuar en Lleida con el trío Aufgang. Eso fue hace unos doce años. Era otra época, también otro mundo. Fue un concierto muy bonito seguido por una cena espectacular a base de caragols a la llauna.

¿Nos puede hacer algún apunte de lo que el público de Lleida se encontrará mañana en el Auditori Enric Granados? Es un espectáculo inmersivo, que parte de la música antigua pero que se contextualiza en nuestra era. Los primeros cuarenta minutos son lineales, acompañados por un amanecer en tiempo real proyectado en una pantalla. Lo que sigue a continuación es una sorpresa que prefiero no desvelar antes de tiempo.