Una Trobada con mucho éxito

El Parc del Cadí de La Seu d’Urgell se llenó ayer de público tanto al mediodía como por la tarde para disfrutar de las últimas actuaciones de la Trobada amb els Acordionistes del Pirineu. Culminaron así cinco intensas jornadas de conciertos, repartidos entre la capital del Alt Urgell, Arsèguel (la localidad donde nació este encuentro musical en 1976), la colegiata de Castellbò y Puigcerdà y que reunieron a más de 4.000 espectadores. Uno de los ‘espectadores’ que ayer estaba más satisfecho por el desarrollo de la última edición era el músico e investigador del folklore pirenaico Artur Blasco, impulsor y alma del certamen acordeonista.

Blasco incluso destacó que el formato del festival ha tocado techo: “La Trobada no puede crecer más, ni tampoco queremos que crezca más”, aseguró. Y es que desde el pasado viernes, con el recital inaugural, y hasta los tradicionales dos Concerts Catalunya de ayer, la programación ha sumado una docena de actuaciones con más de una setentena de intérpretes procedentes de más de una quincena de países, como Canadá, Colombia, Finlandia, Suecia, Francia, Italia, Rusia o Perú. “Cada año recibo llamadas de todas partes y tengo que decir que no a intérpretes que les encantaría venir a tocar pero el festival tiene una duración limitada y, si vinieran todos los que lo piden, podríamos estar tocando una semana seguida”, comentó Blasco, que ya se encuentra en plena preparación de la edición de 2024.

“Tengo ya una tercera parte cuadrada y con el orden de actuación de los intérpretes”, añadió. Entre las citas de este año, destacó el concierto principal de la noche del sábado en la carpa en Arsèguel, que reunió a más de mil espectadores para disfrutar de una cuarentena de acordeonistas de todo el mundo.