TORREGROSSA
'Les hores ferides' gana la 26 edición del Maria Mercè Marçal
Obra de Ricard Garcia, que reflexiona en su poemario sobre cómo sobrevivir a las ausencias de las personas queridas
La gala se traslada a Torregrossa
El escritor del Alt Penedès Ricard Garcia ganó ayer la 26 edición del premio de poesia Maria-Mercè Marçal, que convoca el consell del Pla d’Urgell. Lo hizo con su obra Les hores ferides, que reflexiona sobre cómo sobrevivir a las ausencias de las personas queridas y también sobre afrontar el final de la propia vida. Es una obra “con voluntad de diálogo entre dos formas poéticas, los poemas en prosa y los poemas más líricos en verso” y “construida a partir de preguntarse cuál es el sentido del dolor que sufrimos por las ausencias”, aseguró Garcia.
El presidente del consell del Pla d’Urgell, Carles Palau, destacó que el Premi Maria-Mercè Marçal permite dar valor a la lengua catalana, “que últimamente está sufriendo muchos ataques por parte de posiciones políticas alejadas drásticamente de la democracia”. “Creo que Maria-Mercè Marçal estaría muy de acuerdo con esta defensa del catalán”, dijo, y anadió que “queremos que el premio sea una herramienta más para luchar contra estos ataques”. Por su parte, Àngels Marzo, secretaria del jurado, subrayó que las 39 obras que optaban al premio recogían “las distintas estéticas de la poesía catalana actual, tanto las más experimentales como las líneas más clásicas”. Sobre Les hores ferides, destacó que el volumen tiene una “sólida estructura”. Está dividido en tres partes, cada una formada por 16 poemas que “dialogan de dos en dos”. Esto “da al libro una coherencia y una consistencia que desde nuestro punto de vista fue uno de los aspectos que consideramos más relevantes para decantarnos por este volumen”. La obra será publicada por Pagés Editors. El galadón está dotado con 3.000 euros que corresponden a los derechos de autor de la primera edición. Marzo también apuntó que el jurado decidió otorgar una mención especial a la obra Quan la mort arrela, que se presentó con el seudónimo Tombdelera. La gala se celebró por primera vez en el Palau de Margalef de Torregrossa, después de que el consell decidiera que el acto de entrega del premio sería itinerante, aunque que cada dos años se celebrará en Ivars d’Urgell, de donde era originaria la poeta. La cena reunió a más de 300 personas y contó con la asistencia de la consellera de Educación, Anna Simó. La velada incluyó un recital de poemas de Maria-Mercè Marçal y también una referencia al centenario del nacimiento del poeta Vicent Andrés Estellés.
El presidente del Pla, Carles Palau, ve en el galardón una “herramienta” contra los ataques a la lengua
¿Qué supone para usted ganar el Premi Maria-Mercè Marçal?
Ha sido una ilusión inmensa. Para mí, el jurado es muy potente [lo integran Àngels Marzo, Jordi Pàmias, Jaume Pont, Joan Cornudella y Ramon Rubinat]. Es uno de los premios que tiene prestigio en los territorios de habla catalana.
Su poemario, Les hores ferides, ofrece un diálogo entre las despedidas y las ausencias..
Es un libro que aparentemente contiene mucho dolor, pero no. Cuando habla de todo el tema de las ausencias, una cosa que he hecho es que no haya dramatismo e intentar explicarlo como algo que pertenece al orden natural. Evidentemente, las muertes que vamos acumulando a lo largo de la vida nos dejan muchas heridas y la idea era explicar cómo vamos aprendiendo a vivir con estas heridas, cómo nos hacen más fuertes y cómo nos enseñan el camino a seguir.
¿Por qué esta construcción en tres partes con 16 poesías cada una y una prosa poética y una poesía que dialogan?
Lo de hacer los poemas en prosa y luego los poemas en verso parte de que primero escribí las prosas, pero me faltaba depurar un poco más lo que había escrito. Entonces cogía un elemento de la prosa y lo estiraba, de forma que han acabado siendo parejas de poemas que dialogan y tratan una misma cuestión, pero vista desde dos ámbitos diferentes.
El presidente del consell, Carles Palau, asegura que es muy importante este premio en un momento de “ataques” al catalán. ¿Qué opinión tiene al respecto?
En toda mi obra, este será el sexto libro que publico, he tenido muy presente la idea de hacer una defensa de la lengua. Pienso que cuidar la figura de los poetas y los escritores y que todos los hablantes seamos capaces de transmitir el valor de hablar una determinada lengua es muy importante. Y no tenemos que renunciar. Como ha dicho el presidente del consell, ya hay quien nos quiere hacer renunciar. Si somos lo que somos es por lo que comemos y lo que hablamos y cómo lo hablamos. Y estas dos cosas nos definen como país.
«En toda mi obra he tenido presente la defensa del catalán»