CULTURA
Dos iconos en Taüll de 900 años
Los templos románicos de Sant Climent y Santa Maria siguen celebrando este 2024 los 9 siglos de su consagración
El pasado diciembre arrancó en La Vall de Boí el Any Taüll, la conmemoración del 900 aniversario de la consagración de Sant Climent y Santa Maria, dos de los templos más emblemáticos del conjunto románico Patrimonio Mundial de la Unesco. Todo un año repleto de actividades y actuaciones de conservación y divulgación de estos monumentos.
Hace poco más de 23 años, la declaración del conjunto de iglesias románicas de La Vall de Boí como Patrimonio Mundial de la Unesco puso este enclave cultural del Pirineo de Lleida en la primera línea internacional. Fue un auténtico revulsivo que redescubrió y relanzó estos templos a nivel de turismo y de investigación histórica. Ahora, la conmemoración de los 900 años de la consagración de dos de las iglesias más emblemáticas del conjunto, las de Sant Climent y Santa Maria de Taüll, también busca ser un impulso más para este Patrimonio Mundial gracias a una serie de actividades científicas y de divulgación que arrancaron en diciembre y que el pasado fin de semana cumplió una etapa más con el estreno en Santa Maria de un fragmento de pintura mural recién restaurado.
La programación del denominado Any Taüll, presentado el pasado mes de noviembre, incluye un plan de acciones que se traducen en una inversión de más de 1,1 millones de euros. De hecho, la primera actividad ya se llevó a cabo ese mes de noviembre, unas semanas antes del inicio efectivo de los actos conmemorativos. Fueron diversos trabajos de conservación y restauración de los restos de pintura mural en el ábside mayor de Sant Climent, que obligaron a instalar unos andamios que cubrieron por completo las icónicas pinturas del Pantocrátor y que, evidentemente, supusieron también la interrupción durante unos días de la proyección del mapping, por primera vez en los diez años en que llevaba causando admiración entre los visitantes. Estos solo pudieron contemplar durante aquellos días a técnicos y restauradores trabajando en la limpieza y fijación de pequeños levantamientos de capas pictóricas y la desinsectación y estabilización de diversos elementos muebles de madera.
El sábado 9 de diciembre, ya sin andamios a la vista, el icónico ábside de Sant Climent acogió la inauguración oficial del Any Taüll, un acto presidido por el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, acompañado por la consellera de Cultura, Natàlia Garriga; el presidente de la Diputación, Joan Talarn; y la alcaldesa de La Vall de Boí, Sònia Bruguera. Una fecha histórica, en recuerdo de que el 10 y el 11 de diciembre del año 1123 –justo hacía 9 siglos– el obispo de Roda-Barbastro, Ramon Guillem, consagró los templos de Sant Climent y Santa Maria de Taüll. En el estreno oficial del Any Taüll, la alcaldesa ya sentenció que el programa de actos previstos, “vivo y extenso, dejará huella”.
En efecto, durante estos meses están previstas actuaciones en el emblemático campanario de Sant Climent y en su pintura exterior, desconocida actualmente por el gran público. De hecho, una de las intervenciones que tendrá un mayor efecto será un nuevo mapping, esta vez en el exterior, gracias al cual los visitantes podrán hacerse una idea de cómo lucía el campanario hace 900 años y disfrutar de las decoraciones y policromías originales de la fachada. La nueva videoproyección en el exterior cubrirá dos caras del campanario y los ábsides, e irá acompañada de una banda sonora especial y de una audioguía alternativa para cuando las limitaciones de luz no dejen verla con claridad. Asimismo, también se está actuando ahora mismo en el Centre del Romànic –permanecerá cerrado al público hasta el 10 de diciembre– para implementar su remodelación con nuevas experiencias de realidad aumentada en movimiento, audioguías multimedias y recursos educativos inmersivos.Y entre las iniciativas más ‘sonoras’, la cita anual Lleida Canta se trasladó en abril a Taüll con nada menos que 1.200 cantaires de 38 corales de toda Catalunya cantando al románico.
Santa Maria recupera un fragmento de pintura mural
El sábado de la semana pasada, Santa Maria de Taüll vivió un ‘regreso’ muy especial. Después de más de 50 años, un fragmento de pintura mural románica con la escena del ‘Baño de Jesús’ volvió a su emplazamiento original, sobre una columna de los arcos que separan la nave central del templo de la lateral sur. La pintura se descubrió durante unas obras a principios de los años 60 y, hasta ahora, había estado expuesta en la iglesia vecina de Sant Climent. En 1971, con las obras ya acabadas, se extrajo mediante la técnica del strappo –la misma utilizada en el arrancamiento de las pinturas murales románicas del Pirineo en las primeras décadas del siglo XX– y se transfirió a una tela sobre un plafón para exhibirla en Sant Climent. Ahora, en el marco del Any Taüll, la pintura fue restaurada en el Centre de Restauració de Béns Mobles de la Generalitat y se le ha retornado el carácter mural, de nuevo en su lugar de origen, el templo de Santa Maria. Para ello, los restauradores sustituyeron el conglomerado y dotaron a la obra de un contorno irregular rodeado por un mortero, similar a la capa sobre la que trabajaron los pintores de principios del siglo XII. “Un nuevo momento histórico para la Vall”, destacó la alcaldesa de La Vall de Boí, Sònia Bruguera.