LLEIDA
“Para tocar al nivel más alto necesitas invertir toda una vida”
El prestigioso laudista estadounidense Hopkinson Smith llena Sant Llorenç
“Cuando era un adolescente, toqué la guitarra eléctrica, el piano, canté en el coro..., incluso el banjo y música country, pero a los 18 años me di cuenta de que quería dedicarme a la guitarra y los instrumentos antiguos de cuerda pulsada”, recordaba ayer el prestigioso músico estadounidense Hopkinson Smith (Nueva York, 1946), unas horas antes de protagonizar un concierto en la iglesia de Sant Llorenç de Lleida. Acompañado de su inseparable laúd renacentista, el guitarrista internacional ofreció esta actuación en el marco de la exposición que puede verse actualmente en el Museu de Lleida dedicada al guitarrista de La Granadella Emili Pujol (1886-1980), a quien conoció a principios de los años 70. “Muchos colegas del mundo de la música me hablaron de él y me dijeron que tenía que conocer al maestro”, aseguró Smith, que acabó cruzando el Atlántico para asistir durante cuatro veranos conecutivos a los cursillos de guitarra que Pujol impartió en Cervera. “Me acuerdo del Hotel Canciller de Cervera y de aquel músico, una persona con una presencia casi mágica, muy buen comunicador y con una energía que te transportaba a un estado de bienestar”, comentó el laudista estadounidense, que quiso rendir un pequeño homenaje a su maestro leridano interpretando en Sant Llorenç una fantasía del valenciano del siglo XVI Lluís del Milà, que “a Emili Pujol le encantaba, me decía que era como Chopin, para él era lo máximo en musicalidad”. El grueso del repertorio estuvo dedicado al laudista británico John Dowland, compositor del siglo XVI-XVII, época isabelina, del cual está preparando una nueva grabación discográfica para sumar a su lasrga y exitosa trayectoria. A sus 77 años, Smith sigue en plena forma: “Procuro tocar cada día, enfrentándome a la vejez, porque tocar bien cualquier instrumento exige una dedicación total, pero para hacerlo a nivel más alto, necesitas invertir toda una vida, por lo menos. Hasta ahora me imagino siempre tocando”.