LLEIDA
Adiós a la poeta Rosa Fabregat
La escritora y farmacéutica leridana nacida en Cervera falleció ayer a los 91 años en su domicilio de Lleida. Reacciones de luto y pésame desde el mundo cultural, político y social de Catalunya
Apenas dos semanas después del fallecimiento del artista Joaquín Ureña, Lleida lloró ayer la pérdida de otro gran nombre propio de la cultura de Ponent, la escritora Rosa Fabregat, que murió en su domicilio de la capital del Segrià a los 91 años. Fuentes de la familia informaron que la farmacéutica y poeta tuvo una muerte “natural y plácida”, hacia el mediodía. La persona que la atendía cada día en su casa la encontró sentada en su butaca preferida, con la cabeza ligeramente ladeada, en una sala abarrotada de libros, testigos de su pasión por la literatura. Uno de los primeros en alertar de la triste noticia a través de las redes sociales fue el poeta leridano Jordi Prenafeta, vecino de escalera de Fabregat, tras conocer el óbito por el propio marido de la escritora, el también escritor Josep Maria Prim. Las reacciones de duelo en la red no se hicieron esperar desde la Paeria, la Diputación, el Institut d’Estudis Ilerdencs y el Consell Nacional de les Arts i la Cultura a editoriales que compartieron labor profesional con Fabregat como Pagès Editors o Fonoll y personajes de la Lleida cultural como Antoni Gelonch, Marta Alòs o Postureig Lleida, (ver columna de reacciones), entre otros.
Nacida en Cervera el 3 de febrero de 1933, Rosa Fabregat cursó estudios universitarios de Farmacia, especialidad en la que se doctoró en Barcelona y especializó en Alemania, y que la llevaron a desarrollar diversas labores, como directora técnica o inspectora farmacéutica a caballo entre la década de los 50 y los 60. Tras su trabajo también en el campo de la investigación, se trasladó años después a Llorenç del Penedès para regentar una farmacia, antes de afincarse en los 90 en Lleida, su ciudad de adopción, tras su jubilación.
Pero su gran pasión fueron siempre las letras, destacando sobre todo en el terreno poético. Su obra primeriza, entre 1953 y 1993, la acabó recopilando en el volumen Ancorada en la boira. Un nuevo libro, titulado La temptació de vol, reunió su producción poética hasta 2011.
Como narradora, cultivó de forma especial el género de la ciencia ficción, con títulos como El turó de les forques (1983) –donde se acercó a la ciencia ficción feminista–, Embrió humà ultracongelat número F-77 (1984) y La dama del glaç (1997). Y su novela La capellana (1988) levantó polémica al cuestionar la exclusión de las mujeres del sacerdocio.
Creu de Sant Jordi en 2017 y Premi Nacional en 2022
En 1978, Rosa Fabregat ganó su primer premio de poesía, el Vila de Martorell, por el poemario Estelles, un galardón que ells siempre recordaba que la animó a seguir una trayectoria literaria. Una carrera que se vio reconocida en 2017 con la Creu de Sant Jordi, que recogió en mayo de aquel año en el Saló de Cent del Palau de la Generalitat de manos del entonces President Puigdemont. Aquel mismo año, la Paeria le concedió la Medalla al Mèrit Cultural. Sin embargo, la distinción que más la alegró llegó hace apenas dos años y medio, el Premi Nacional de Cultura. “Es lo más grande que hay. Siempre supuse que nunca tendría este reconocimiento a mi trayectoria literaria”, explicó entonces en una entrevista en SEGRE. Recibió el galardón de manos de la poeta Laia Noguera y de su nieta (en la foto).