TRIBUNALES
El litigio, dentro y fuera del tribunal
El fiscal del TSJC asegura en el juicio ‘en ausencia’ al exconseller Lluís Puig que el arte de Sijena seguiría en Lleida de no ser por el 155. Testigos dicen que no dependía de él entregar las obras

Acto de apoyo al exconseller de Cultura Lluís Puig ayer a las puertas del TSJC, organizado por Junts. - EUROPA PRESS
El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) celebró ayer el juicio al exconseller de Cultura Lluís Puig (acusado de desobediencia por no haber entregado en julio de 2017 las 44 obras de arte del Museu de Lleida al monasterio de Sijena), en una jornada que se vivió con intensidad tanto dentro, con Puig juzgado ‘en ausencia’, como fuera, a las puertas del TSJC, en un acto político organizado por Junts (ver desgloses). El fiscal afirmó que Puig “no tenía voluntad” de enviar las obras de arte, que “probablemente” seguirían en Lleida de no haber sido por la intervención de la Generalitat con la aplicación del artículo 155, y mantuvo así su petición de 2 años de inhabilitación y 6.000 euros de multa por desobediencia. El abogado de Puig, Jaume Alonso-Cuevillas, aseguró que el entonces conseller de Cultura mostró claramente una “voluntad” de cumplir la resolución del juzgado de Huesca, pero que pidió tiempo para poder estudiar un tema “complejo”. De hecho, uno de los testigos que declararon ayer, el abogado de la Generalitat, Xavier Muñoz, aseguró que que “la Generalitat no tenía la posesión inmediata sobre estas piezas”, pues estaban en manos del Museu de Lleida, que tiene “entidad jurídica propia” a través del consorcio formado por cuatro instituciones y el obispado. Por su parte, Pilar Bayarri, jefa de los servicios jurídicos de la conselleria de Cultura, afirmó que “no consta que la Generalitat se negara a entregar las obras hasta que la sentencia, que estaba recurrida, no fuese firme”. En este mismo sentido, el exdirector general de Patrimonio Cultural, Jusèp Boya, comentó que las cosas tenían que hacerse “conforme a derecho, de acuerdo con la legislación catalana, puesto que eran unos bienes catalogados”, y que la ley de Patrimonio Cultural era “muy clara sobre la unidad de la colección de arte”. También declaró Xavier Quinquillà como portavoz de la Plataforma d’Entitats Culturals de Lleida, que explicó que nunca se reunió o habló con Puig sobre las obras, y no recordó que el exconseller asistiera a las “acciones ciudadanas pacíficas” que se organizaron.
El fiscal concluyó que “se nos ha dicho que su decisión era cumplir, pero no cumplió, como también se nos dijo que tenía intención de comparecer y no ha acudido a declarar”.
Santi Vila no declara como testigo al estar acusado
El exconseller de Cultura Santi Vila, predecesor de Puig en el cargo y citado como testigo, se acogió ayer a su derecho a no declarar puesto que está acusado por desobediencia por los mismos hechos pero en un juzgado de lo penal de Barcelona –ya que ahora no es aforado como Puig, que es diputado en el Parlament– y el tribunal le exime de la obligación que tienen los testigos de decir la verdad. El abogado Jorge Español, en representación de Villanueva de Sijena, lo lamentó, a lo que el presidente del tribunal, Jesús María Barrientos, respondió irónicamente que “es lo que tienen los derechos”. Por otro lado, Junts protagonizó un acto de apoyo a Lluís Puig a las puertas del TSJC. Jordi Turull reprochó al Govern que no se solidarice con el exconseller y criticó a Illa: “Mientras la Guardia Civil preparaba el expolio del Museu de Lleida, él se manifestaba con la extrema derecha”, en alusión al apoyo del PSC al PP y Vox en 2017 con el artículo 155 y la intervención de la Generalitat. Las hermanas de Lluís Puig se sumaron al acto con una estelada. Illa replicó a Turull que “todo lo que digo lo hago, pero no todo lo que hago lo digo. Creo que queda claro”. El President deseó que el juicio “vaya bien”.
Espera salir “bien” de un caso que “no debería haber empezado nunca”
El exconseller Lluís Puig aseguró que espera salir “bien” del juicio y “poder cumplir mi sueño de volver al salón de plenos del Parlament como diputado y que termine este expediente que seguramente no debería haber empezado nunca”. Era una declaración en un vídeo, que tenía que haberse emitido en el acto de apoyo de Junts ante el TSJC, pero que no pudo emitirse al fallar el audio. “Unas obras de arte que estaban bien guardadas, conservadas, preservadas y expuestas para todos los públicos en el Museu de Lleida. Ahora no sabemos dónde están ni cómo están, y qué piensan hacer con ellas”, criticó.