Rusia se alza con la Copa de la Reina en Lleida

Rusia se adjudicó ayer el título de campeón de la XLV edición del Campeonato de Europa Sots-18 de Selecciones Femenines-Copa de la Reina Annie Soisbault, que desde el viernes se ha venido disputado en las pistas del Club Tennis Urgell. El combinado ruso, primer cabeza de serie del torneo, superó en la final a Holanda por 2-0, mientras que España, que cayó en semifinales, acabó cuarta al perder la final de consolación ante la República Checa por 2-1.

Rusia hizo buenos los pronósticos y le bastó con ganar los partidos individuales para alzarse con un nuevo título, aunque no estuvo exenta de sufrimiento. En el primer duelo, que enfrentaba a las número 2, Anastasia Gasanova ganó por 3-6, 6-4 y 6-4 a la holandesa Suzan Lamens, mientras que en el partido entre las número 1, la rusa Amina Anshba se deshizo de Nina Kruijer por 6-2, 5-7 y 7-5, lo que daba a Rusia la victoria matemática.

El combinado estatal perdió la final de consolación ante la República Checa, que acabó tercera de Europa

En la lucha por la tercera posición del torneo, la República Checa acabó imponiéndose a España. Guiomar Maristany abrió la confrontación ante Michaela Bayerlova y, si bien la barcelonesa empezó bastante descentrada y cedió la primera manga por 4-6, poco a poco se repuso para acabar llevándose el partido por 6-3 y 6-2. Con el 1-0 a favor de España le llegó el turno a Paula Arias, que tenía la oportunidad de sentenciar ante Johana Markova. Parecía que estaba en el buen camino después de ganar el primero set por 4-6, pero su rival reaccionó ante una rival que fue de más a menos. Al final, Bayerlova se anotó los dos sets siguientes por 6-3 y 6-2 e igualando la eliminatoria. En el doble, la pareja española formada por Paula Arias y Júlia Payola mantuvo el tipo en el primer set, que a punto estuvo de ganar en el tie break, pero al final fueron las checas Johana Markova y Anna Slovakova las que ganaron la manga por 7-6 (3). A partir de ahí, el doble español se hundió y cedió un set en blanco para dar el tercer puesto a las checas.

También se disputaron los enfrentamientos que decidían en resto de posiciones de la Copa de la Reina, que dejó a Hungría en la quinta plaza, Suecia en la sexta, Italia en la séptima y Moldavia cerrando el cuadro de honor como octava.