LO MEJORLO PEOR
Prueba no superada
El Lleida suspende el primer test serio de la temporada con una inapelable derrota ante el Hércules || Los de Siviero, que acabó siendo expulsado, fallan en defensa y en ataque
Si el partido de anoche en el Rico Pérez alicantino tenía la condición de prueba de fuego para calibrar el estado del equipo ante uno de los grandes de la categoría, eterno candidato al ascenso y que en el pasado ejercicio cayó en tercera ronda ante el Cádiz, cabe calificarla de rotundo fracaso. El Lleida de Siviero, que fue expulsado por una absurda protesta en el añadido y ya con el partido más que sentenciado, no pasó la prueba del algodón. Con un sistema conservador en el primer periodo supo al menos aguantar a un desdibujado Hércules, silbado en ocasiones por su público, que aguantaba gracias al excelente partido del mediocampista Checa, que se colocaba como tercer central cuando el equipo atacaba para que pudiesen adelantarse los laterales Dalmau Peña. Y también de Chechu, que se echó el ataque local sobre sus espaldas y que acabaría siendo clave en la victoria. En el primer tiempo el marcador no se movería porque el Hércules no supo superar nunca el entramado defensivo azul (ayer de amarillo) y el Lleida solo lo intentó una vez con un tiro lejano de Cristian Gómez, ya en el minuto 37, que se fue por encima del larguero.
Sin embargo, el segundo tiempo aún fue peor para el Lleida. Tras una salida intensa en que los de Siviero forzaron dos córners consecutivos, el Hércules comenzó a funcionar. Un error de Campos con el balón en los pies acabó en córner que, cabeceado por Checa, sumado al ataque, pudo haber abierto el marcador. Chechu lo intentó dos minutos después y finalmente llegó el 1-0. Un balón entre los centrales acabó controlado por Chechu que se fue por velocidad, dejó atrás a Campos y Òscar Rubio y marcó a portería vacía. Un golazo que puso contra las cuerdas a un Lleida que no reaccionó. Máxime si se tiene en cuenta que a renglón seguido llegó el 2-0. Otro balón entre los centrales tras un error de Toño Vázquez permitió a Chechu volver a superar a todos y mandar en horizontal una asistencia a su compañero Espinosa que no desaprovechó.
Y aquí vino lo peor. Con el 2-0 el Lleida, por primera vez esta temporada, bajó los brazos al entender que el partido no tenía ya solución –de hecho, como ya es sabido, el Lleida no remonta en campo contrario desde enero del 2014 con una victoria en Reus (1-2) tras ir perdiendo 1-0.
Siviero movió el banquillo buscando un revulsivo que esta vez no se produjo. El Hércules dio un paso atrás para intentar sentenciar a la contra y estuvo a punto de lograrlo. Javi Flores y David Mainz tuvieron el gol en sus botas pero sus remates salieron desviados. Aunque quien realmente tuvo el 3-0 fue el mismo Mainz encarando en solitario a Campos pero el guardameta leridano le adivinó la intención y supo despejar la pelota a córner. En cambio el Lleida aunque dio la sensación de dominar la situación teniendo más posesion que su rival fue incapaz de generar ni una sola ocasión de peligro ni de encontrar un hueco para probar un remate. Y claro, si se falla atrás y no se remata ni una sola vez entre los tres palos de la portería rival, es prácticamente imposible hacerse con la victoria. Ahora espera el Levante B para conseguirla.