Las peñas aceptan un mediador ante el Lleida Esportiu

Las peñas del Lleida Esportiu están abiertas al diálogo y aceptarían que haya un mediador en el conflicto con el club. Solo Rudes Lleida expresó el miércoles en un comunicado que las posturas son “irreconciliables” con la junta directiva. Tanto Molo Esportiu como És Un Sentiment, aunque esperan a la reunión interna de los miembros de cada una de ellas, están dispuestas a conversar con los responsables del club y dirimir las diferencias antes de que la situación se enquiste más.

Ayer, la asociación Amics del Lleida emitió un comunicado, tras el del miércoles de la peña Rudes, en el que se asegura que estudian emprender acciones legales si el presidente Albert Esteve no se disculpa públicamente ante los miembros de la junta directiva de este colectivo de aficionados “que fueron acusados y difamados públicamente”, reza el escrito.

Al mismo tiempo, Amics del Lleida, a pesar de que pueda parecer una paradoja, se ofrecen a “escuchar y dialogar con todas las partes” haciendo las veces de mediadores.

Desde el club se entiende que son las peñas las que tienen que empezar “con nuevas bases de trabajo” para ser readmitidas, ya que el club ahora no las reconoce como tales, y se lamentan, como dijo el presidente Albert Esteve de que “teníamos que haberlo parado antes”, después de denunciar amenazas y actos vandálicos en el estadio y en el club. En este punto, las peñas y Amics del Lleida están de acuerdo con el club en condenar la violencia, pero rechazan que se les relacione a todos con los aficionados incívicos.

Desde la Paeria se sigue con preocupación el conflicto. El alcalde Àngel Ros ya se ha ofrecido públicamente como mediador y algún otro grupo municipal como CiU, a través de su concejal Paco Cerdà, también vería con buenos ojos la intercesión municipal.

El Lleida, que visita el domingo al Alcoyano, no juega en casa hasta dentro de dos jornadas y mientras tanto los jugadores, como dijo Guillem Martí viven “aislados” y únicamente concentrados en el fútbol.

José Antonio Seligrat Bernal (Torrent, 20-10-1968) ya se enfrentó a su exequipo cuando dirigía al ahora desaparecido Huracán. Ahora, el domingo, al frente del Alcoyano, que está imbatido y es segundo a solo tres puntos del sorprendente líder Ebro, recibe a un Lleida anclado en la decimosexta plaza a siete puntos del conjunto de Alcoy.

“Excepto ante nosotros le deseo lo mejor al Lleida. Y no solo yo, sino todos los que estamos aquí y estuvimos allí (su preparador físico Josep Maria Ferrer “Joma” y los jugadores Carlos Barreda y Mario Fuentes) porque le tenemos mucho cariño a ese club. A nivel deportivo yo viví dos años extraordinarios y jugamos dos play offs con el presupuesto más bajo de la historia del club. Y a nivel personal yo he vivido más tiempo en Lleida que en mi tierra natal y allí ha sido donde me formé como persona. Lleida es como mi casa. Me hubiese gustado mucho no salir de allí”, se explayó ayer en su explicación Seligrat.

Pese a lo que indica la clasificación no se fía del Lleida. “Ya sabemos como es esta categoría de disputada y que cuesta aún más ganar fuera que en casa. Así que en teoría deberíamos tener más confianza nosotros porque jugamos como locales, pero el Lleida es una entidad de máximo nivel, con jugadores de gran categoría en Segunda B. Lo que pasa es que está en fase de construcción y cuesta conjuntar un equipo”, afirma comprensivo. Elogia también a su colega Gustavo Siviero. “Me gusta su propuesta de querer que su equipo sea siempre protagonista”.

Sobre el tema club-peñas, opina que “todos tienen que poner de su parte e ir de la mano unidos porque son complementarios en el fútbol”.