Màrquez saldrá segundo

Jorge Lorenzo avisó ayer de sus intenciones en el último gran premio de la temporada, que no son otras que desperdirse de Yamaha por todo lo alto. El balear rodó en 1:29.401, récord absoluto de la categoría, tras pulverizar el anterior que él mismo ostentaba desde el pasado año con 1:30.011. Su superioridad fue absoluta, a pesar de los esfuerzos de Marc Màrquez, que se tuvo que conformar con la segunda posición, a más de tres décimas de segundo del mallorquín.

Lorenzo, que con esta pole iguala con el de Cervera como el piloto que más veces ha salido desde la primera posición (65), arrancó la sesión dispuesto a poner muy difíciles las cosas a sus rivales y en la segunda vuelta marcó un 1:29.849, que ya era nuevo récord de vuelta más rápida de la categoría en Xest. Tras una parada en su taller, volvió a salir a la pista para protagonizar su segundo mejor tiempo y otro nuevo récord, 1:29.613, aunque pocos metros más atrás iba Màrquez, que rebajó la ventaja de más de seis décimas de segundo de su rival de Yamaha en apenas una décima. El leridano lo intentó, pero con un cuarto parcial que se le “atragantó”, al final se tuvo que conformar con la segunda plaza, justo delante de Rossi.

Marc, que fue el más rápido en las dos tandas libres de ayer, a pesar de una caída en el FP4, reconoció el dominio de Lorenzo. “Sabía que sería difícil la pole, pero lo he intentado al máximo. Me estaba preparando ya en el FP4, intentando buscar los límites y me he caído, pero en la calificación lo he intentado con tres neumáticos a ver qué pasaba pero ha sido imposible. Jorge estaba un pasito por delante, pero para la carrera no estamos tan lejos”, subrayó.

En Moto2, su hermano Àlex saldrá décimo, a siete décimas de segundo del suizo Thomas Luthi. En Moto3, el más rápido fue el barcelonés Aron Canet, que firmó la primera pole de su carrera, por delante del ya proclamado campeón, el sudafricano Brad Binder.