Marc cierra el año en el podio

El Mundial de MotoGP bajó ayer el telón en Cheste con un Gran Premio de la Comunitat Valenciana dominado de principio a fin por Jorge Lorenzo, que se despedía así a lo grande de Yamaha, y con un gran segundo puesto de Marc Màrquez. El leridano pudo cerrar la temporada de su tercer título de la categoría reina y quinto de su carrera en el segundo cajón del podio después de sobreponerse, cómo no, a una mala salida y a completar una gran remontada, haciendo olvidar las caídas sufridas en Phillip Island y Sepang. Ayer ya se dio el primer baño de masas con sus fans en Cheste, con los que hizo el primer aperitivo de festejo antes del gran homenaje que Cervera le dispensará el próximo sábado, eso sí, después del test que hará desde hoy en el trazado valenciano preparando el 2017.

Lorenzo se despidió de la marca con la que debutó en MotoGP como lo hacen los grandes campeones, con una victoria forjada desde la primera hasta la última vuelta. La mala salida de Màrquez y el mucho tiempo que tardó en superar a sus rivales de turno, le impidieron pelear por la victoria. El balear no falló en la salida, como en él suele ser habitual, y al llegar a final de recta encabezó un pelotón en el que tras su estela se situó Iannone, Maverick Viñales y Rossi. Màrquez, algo rezagado al apagarse el semáforo al no conseguir evitar que se levantara la rueda delantera de su moto, se tuvo que fajar con algunos rivales para completar el primer giro en la quinta plaza, pegado tras el rebufo de Rossi y por delante de su propio compañero en el equipo Repsol Honda, Dani Pedrosa, quien hizo una buena salida y pasó de la octava a la sexta plaza.

“Ha sido la peor salida del año; no ha sido solo mi error, no sé qué ha pasado con el embrague”

Lorenzo, con vuelta rápida y nuevo récord de carrera ya en el segundo giro (1:31.179), aprovechó que todo se le puso de cara con el fallo de algunos de sus rivales en la salida para marcar ciertas diferencias, ya cercanas al segundo de distancia respecto a su inmediato perseguidor, Iannone. En la tercera vuelta la ventaja de Jorge Lorenzo ya era superior al segundo, con nuevo récord de vuelta rápida en la cuarta (1:31.171), y tras él se formó un cuarteto con Iannone, Viñales, Rossi y Màrquez, que buscaba el lugar idóneo para adelantar al rival, pues el italiano de Ducati dio la impresión de estar ralentizando a sus rivales, lo que propició que desde atrás se uniese a ellos el también italiano Andrea Dovizioso.

Con seis vueltas completas al trazado, el balear ya contaba con una ventaja de casi dos segundos (1,926) y la carrera perdió a uno de sus protagonistas destacados, Pedrosa, que se fue al suelo en la curva dos sin hacerse daño pero también sin la posibilidad de continuar. La ventaja de Lorenzo iba en aumento y al siguiente giro ya era de 2,556 segundos. Rossi no pudo con Iannone hasta la novena vuelta, pero a final de recta entró completamente colado y regaló nuevamente la tercera plaza, teniendo que abrirse para evitar la caída, momento que aprovechó Iannone para volver a adelantarlo.

En tanto, el mallorquín iba abriendo cada vez más las diferencias, de casi cuatro segundos en el décimo giro y superior aún una vuelta después, con el quinteto que le perseguía peleándose constantemente por la segunda posición. Rossi consiguió mantener la segunda plaza y Màrquez comenzó a atacar a Iannone para intentar superarlo, pero sus primeros esfuerzos resultaron baldíos y los ataques entre todos ellos constantes, hasta que en la vigésima vuelta el piloto de Repsol Honda logró superarlo para ponerse segundo, cerrando todos los huecos, con Rossi entonces cuarto.

El ritmo constante de Lorenzo le permitió consolidar una cómoda ventaja que le garantizó su cuarta victoria de la temporada, algo semejante a lo que hizo Màrquez en la segunda y si bien rodó en el tramo final casi medio segundo más rápido que el de Yamaha, no pudo neutralizar su ventaja en lo que restaba de competición. Al final de la prueba el leridano lamentaba la mala salida. “Ha sido la peor salida del año; no ha sido solo mi error, no sé qué ha pasado con el embrague, que ha patinado mucho rato y por eso me han pasado tantos pilotos. Un desastre. Esto me ha penalizado toda la carrera”, dijo. Aun Así, reconoció que “estamos contentos porque hemos conseguido un podio”.