“La situación es límite”

El entrenador del Lleida Esportiu, Gustavo Siviero, admitió ayer que “estamos en una situación límite”, aunque espera que el partido de mañana en Sabadell suponga un cambio de tendencia. “Tiene que ser un punto de inflexión. Sabemos de la complejidad de nuestro momento, de las urgencias y necesidades, pero vamos con la intención de conseguir una victoria y revertir esta situación”. Para este encuentro el técnico tiene las bajas de Casares, Miki Muñoz y Mia Guasch.

Dijo estar más preocupado “por no marcar nosotros” que por los goles encajados. “Si marcamos antes que el rival todo va distinto. Nos cuesta mucho hacer daño al rival y cuando encajamos un gol tenemos la sensación de que será muy difícil revertir la situación”, por lo que admite que se trata de “un aspecto psicológico. El equipo tiene la sensación de que si no marcamos el rival, en media situación de gol, nos marcará”.

No obstante, cree que “el equipo está anímicamente bien, ha trabajado bien esta semana, aún sabiendo que es un momento incomodísimo para nosotros”. En su opinión, “salvo ante el Barça B, que en la primera parte el rival pudo aumentar la diferencia, en los demás el equipo defensivamente ha estado bien y no ha sufrido, aunque es cierto que ha habido fallos puntuales que nos condenan a encajar goles”.

Agradeció “enormemente” la confianza que está mostrando el club con él porque “es una situación que no es normal y en cualquier otra situación la decisión también hubiera sido otra. El club está con nosotros y en contacto permanente para solucionarlo cuanto antes”.

Señaló también que a la plantilla no le afectan las cuestiones extradeportivas, como el conflicto con una parte de la afición o las denuncias de exjugadores. “El club me dice que lo tiene controlado y que sí se puede fichar en el mercado de invierno, hay capacidad de hacerlo”, por lo que “no nos vamos a distraer con ninguna otra cuestión y tampoco sería de hombres buscar excusas en otros lados”.

En cuanto a la amenaza de las bajas, dijo que “los jugadores son inteligentes. Saben que esto es cuestión de rendimiento y que todos, ellos y el cuerpo técnico, estamos expuestos”.