Ramos vuelve a decidir

Sergio Ramos volvió a ser el salvador del Real Madrid al cambiar el rumbo de un partido que se le ponía cuesta arriba tras el gol en la primera parte de Dries Mertens para el Nápoles, y firmó un doblete con dos testarazos a saques de esquina de Kroos, el segundo de ellos con la ayuda de un rival, para sellar el pase a cuartos de la Liga de Campeones.

Sufrió el Real Madrid en Nápoles para hacer bueno el 3-1 de la ida en una primera parte en la que fue superado por su rival, falto de intensidad y sin ayudas defensivas de sus delanteros que provocaron desequilibrios. Martens plasmó el dominio italiano con su disparo cruzado a la red a los 24 minutos y pudo firmar el segundo si no es por el poste de la portería de Keylor Navas. También repelió la madera la llegada más peligrosa del Real Madrid en la primera parte, en una clara ocasión de Cristiano Ronaldo.

Tras la reanudación, el equipo de Zinedine Zidane cambió su actitud y Ramos firmó dos tantos de cabeza en los minutos 52 y 57 que dejaron KO al cuadro napolitano, que veía como se les escapaba su sueño de la remontada. Con la eliminatoria sentenciada, Álvaro Morata vio puerta para firmar el mismo resultado de la ida (1-3).

A pesar de haber sufrido mucho al principio del encuentro, donde el Nápoles estuvo muy cerca de ponerse 2-0, el Real Madrid se metió en los cuartos de final de la Liga de Campeones por séptimo año consecutivo y sigue invicto esta temporada. A los jugadores blancos no les afectó en nada que aficionados napolitanos les perturbaran el sueño la noche del lunes al martes. El Nápoles, por su parte, salió ovacionado por sus 60.000 aficionados, que nunca dejaron de cantar y animar a un equipo que nunca se vino abajo.