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“Está todo por decidir”

Luis Enrique, ayer durante la rueda de prensa.

Luis Enrique, ayer durante la rueda de prensa.

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El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique Martínez, aseguró ayer que sería “de chiflados” cambiar las cosas por la remontada en octavos de Liga de Campeones ante el París Saint-Germain (6-1) y afirmó que lo que importa es lo que suceda durante toda la temporada, que puede significar “cero título o tres”, además de advertir del peligro del RC Deportivo, al que se enfrentan hoy en Riazor (16.15 horas).

“No ha cambiado nada, porque sería un poco de chiflados cambiar algo por lo que suceda en 90 o 95 minutos”, declaró en la rueda de prensa previa. “De lo único que somos conscientes es de que queda todo por decidirse, de que hay ocho equipos en la Champions, que luchamos con dos rivales por la Liga y que estamos en la final de Copa. Eso puede significar cero títulos o tres. Lo único que podemos controlar es lo que haremos contra el Deportivo”, añadió.

El técnico respondió así al preguntarle por los medios madrileños que culparon al árbitro de la remontada

En este sentido, apeló a mantener la calma a pesar de la euforia. “Es un hándicap a valorar y que tenemos que resolver. Me fío de la cordura y la sapiencia de mis jugadores; sabemos que estamos en el tramo final de temporada y que queda todo por disputar. La dificultad será máxima en este final de temporada y queremos estar ahí”, indicó.

Desde que culminó una remontada sin precedentes, los medios del mundo entero han cubierto de elogios a los azulgranas. Todos menos algunos de Madrid, desde donde han culpado al árbitro de lo sucedido. “Pasa palabra”, fue toda la respuesta que pudieron arrancarle los periodistas a Luis Enrique al respecto.

También le preguntaron por la remontada al técnico del Real Madrid, Zinedine Zidane, que dijo que “el Barça no es más peligroso que antes, es el mismo equipo, no cambia nada” y rehuyó opinar sobre cuánto influyó el árbitro en la victoria azulgrana.

Por otra parte, Neymar y Rafinha son baja para el partido de hoy en Riazor. Los dos brasileños, claves en la victoria por 6-1 ante el PSG en Champions, no se ejercitaron ayer por la tarde con el equipo, por lo que Luis Enrique decidió que se quedaran en Barcelona.

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