OLIMPISMO CANDIDATURAS
Barcelona renuncia a los Juegos de Invierno de 2026
Barcelona no presentará finalmente su candidatura a los Juegos de Invierno del 2026. El ayuntamiento lo anunció ayer después de conocer las conclusiones del informe elaborado por la Comisión no permanente del Consell Municipal sobre la viabilidad de una candidatura Olímpica y Paralímpica. El ‘no’ frena cualquier posibilidad de entrar en la carrera por la designación, que dará a conocer el COI en 2019, pero el consistorio mantiene “la puerta abierta” a planteárselo en el futuro.
Era una negativa ya esperada desde hace tiempo que pone fin a un proyecto que ha conocido varios retrasos desde que la idea fuera lanzada en 2010 por el exalcalde Jordi Hereu, en aquel entonces para el 2022, una fecha que se retrasó al 2026 cuando Convergència gobernaba el consistorio y que nunca despertó el interés del equipo municipal actual que lidera Ada Colau, forzado en su día por sus socios de gobierno y por la oposición a estudiar al menos la viabilidad de un proyecto que solamente ha contado con el impulso de los alcaldes del Pirineo. El acuerdo que descarta la candidatura lo han firmado Barcelona en Comú, PSC, ERC, Ciutadans y el Grup Municipal Demòcrata, que formaban la comisión sobre su estudio. El informe ahonda en la falta de certeza sobre el consenso que debe reunir una aventura de este tipo, y considera que no hay tiempo para elaborar un proyecto ganador.
La Generalitat respondió de inmediato y se abanderó como líder de futuras convocatorias. “Asumimos el relevo que nos viene desde el ayuntamiento de Barcelona y el Govern toma el liderazgo con entusiasmo”, señaló el secretario general de Deportes, Gerard Figueras. El vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, de visita ayer en La Seu, dijo que “siempre hemos estado convencidos de que es una gran oportunidad y nos comprometemos a trabajar para facilitarlo”. Uno de los más firmes defensores de la candidatura, Albert Batalla, alcalde de La Seu, dijo que la renuncia no implica enterrar la opción olímpica. “Celebro que el ayuntamiento de Barcelona rectifique y no cierre la puerta a la apuesta olímpica para celebrar unos Juegos de Invierno Barcelona-Pirineus”, escribió, pensando ya en el 2030.