La Cursa de la Boira apuesta por la naturaleza

La cuarta edición de la Cursa de la Boira, que este año se ha retrasado al 26 de marzo, vuelve a apostar por un recorrido con menos asfalto y más naturaleza. La prueba, que se enmarca dentro de los actos del Saló de l’Esport i Turisme Actiu de Muntanya de Lleida, tendrá un recorrido de 10,6 kilómetros, de los cuales el 85 por ciento discurrirá sobre tierra, ya sea por caminos, la canalización del Segre y por la Mitjana, donde la organización, que corre a cargo de GoGoGo Runners Club, ha marcado un circuito que pasa especialmente por los miradores de pájaros. “Es una carrera de naturaleza dentro de la ciudad”, apuntó Estefi Climent, miembro del club organizador.

Como viene siendo habitual, la prueba se podrá hacer corriendo o andando, modalidad esta última que cada vez va ganando más adeptos. De hecho, los que hagan la marcha, que saldrán diez minutos más tarde, doblan en número a los atletas, algo que se repite desde la primera edición. La club espera llegar al medio millar de participantes –actualmente tiene casi la mitad–, aunque es consciente de que la proliferación de pruebas puede hacer bajar la inscripción.