Adiós al play off

El Lleida Esportiu solo pudo empatar este domingo ante el Valencia Mestalla (1-1) en el Camp d’Esports y se despidió matemáticamente de sus opciones de play off. Si el sábado, el equipo azul ya estaba virtualmente fuera del play off y quedaba a expensas de la decisión del TAD tras el triunfo del Badalona, la carambola que necesita ahora aún es mayor al no ganar al Valencia B.

Resumiendo, la única y remota posibilidad que le queda al Lleida de hacer el play off es que el TAD le dé los tres puntos del Atlético Saguntino, ganar al Eldense, que pierda el Badalona ante el Levante B y que no gane el Atlético Baleares al Alcoyano de Toni Seligrat. A ese clavo ardiendo se agarra el club, pero la realidad es que el play off es ahora mismo una auténtica quimera para el Lleida.

El partido de este domingo sonó a despedida en el Camp d’Esports porque la realidad es la que es aunque se mantenga una última esperanza. Incluso el técnico azul Gustavo Siviero dejó entrever que no continuará la próxima temporada. “Tampoco hay que ser muy listo para saber que no soy la opción. El club no me ha dicho nada”, son algunas de sus frases textuales al finalizar el partido.

El Lleida ha hecho una gran segunda vuelta, en especial en el Camp d’Esports donde la ha completado imbatido

Ni una gran segunda vuelta, con una racha increíble de partidos invicto en casa (once en concreto, con nueve victorias y dos empates sumado el de este domingo), ha podido enganchar al Lleida de Siviero a los puestos de privilegio. Ha sido como nadar hasta la extenuación para acabar muriendo en la orilla.

Algo así como la alegoría del partido de este domingo en el que los azules, que siempre corrieron detrás de un rival muy superior, se encontraron con un gol en la primera parte de Marc Nierga, que aprovechó un error garrafal de la defensa valencianista. Sin embargo, no pudieron aguantar la ventaja hasta el final. En el minuto 89, de la forma más cruel aunque merecida, el Valencia B se llevaba los tres puntos del Camp d’Esports gracias a su mejor delantero y una de las estrellas del equipo, Aridai, que salió en los últimos minutos, probablemente reservado por su entrenador Curro Torres debido a que la derrota del Villarreal B había asegurado el play off al filial ‘che’ antes de jugar en Lleida. Ese gol a última hora fue algo así como darle a probar al Lleida de la misma medicina con la que ha ganado muchos partidos esta temporada. Así es el fútbol.

El partido debió decantarse, por dominio del balón y ocasiones de gol, del lado visitante que dispuso de un larguero, lanzó 12 córners e hizo lucirse a Campos, además de un gol bien anulado a Rafa Mir por fuera de juego. Hay que reconocer que el Lleida trabajó mucho defensivamente, su actitud y esfuerzo fueron encomiables y llegó a acariciar la victoria. Le faltó salir con el balón jugado con mayor claridad, pero hay que tener en cuenta la entidad del rival que había enfrente, quizás el mejor que ha pasado por el Camp d’Esports este año.