Con Messi basta

Un triplete de Leo Messi y otros dos goles de Gerard Piqué y Luis Suárez ventilaron el derby contra el Espanyol (5-0) y colocaron líder al Barcelona, que ayer volvió a aprovechar un nuevo tropiezo del Real Madrid en el Bernabéu. Con tan solo tres jornadas de Liga disputadas, el Barça, que ha firmado un pleno de victorias, ya aventaja en 4 puntos al equipo de Zidane.

Bajo el paraguas de Messi, el nuevo Barça de Ernesto Valverde va ganando tiempo mientras se encuentra a sí mismo. Ayer, con el debut de Dembélé en la segunda mitad –el fichaje más caro de la historia del club–, dio un pasito más y se llevó merecidamente un duelo que dominó desde el inicio.

Dembélé, el fichaje más caro de la historia del club, debutó con su nuevo equipo y jugó 22 minutos

Salió el Barça a morder arriba desde el primer minuto, pero sin lograr inquietar a Pau López. Tuvo que ser el uruguayo Luis Suárez, en un lejano lanzamiento de falta, quien pusiera a prueba al meta del Espanyol, que atajó sin esfuerzo.

Valverde volvió a apostar por el 4-3-3, esta vez con Deulofeu por la derecha, Luis Suárez por la izquierda y Messi de nuevo como falso ‘9’, un recurso con el que está sacando partido, y de qué manera, a todo el talento del crack de Rosario.

Con Messi liderando por enésima vez la ofensiva azulgrana, el Barcelona solventó una primera parte que controló bien, pero en la que no abundaron las ocasiones de gol.

El argentino inauguró el marcador, tras recibir, en el corazón del área, un afilado pase de Rakitic, abrirse paso entre Hermoso y David López con un regate seco y enviar un obús por toda la escuadra. Un golazo, aunque en claro fuera de juego, que puso el 1-0 en el marcador en el minuto 26.

Messi le devolvería el regalo a Rakitic poco después, en una combinación entre ambos que acabó con un disparo colocado del croata y una gran estirada de Pau.

Pasada la medida hora llegaría el segundo del ‘10’. Esta vez su socio fue Jordi Alba, quien combinó con el delantero argentino en una contra que Messi convirtió en el 2-0 tras adelantarse a Aarón, para rematar al fondo de la red desde el primer palo y dejar el partido encarrilado.

El segundo tanto local espabiló al Espanyol, que hasta entonces había intentado, sin éxito, acercarse a la meta defendida por Ter Stegen.

Los de Sánchez Flores se replegaban bien e intentaban presionar la salida del conjunto azulgrana, pero cuando lograban la posesión, el balón les duraba un suspiro.

Solo algún detalle de calidad de Leo Baptistao y Piatti obligaban a prestar mayor atención a la defensa azulgrana. Aun así, los blanquiazules estuvieron a punto de acortar distancias en la única ocasión que tuvieron en el primer tiempo. El propio Piatti remató un balón muerto dentro del área que se estrelló en el palo izquierdo de Ter Stegen, tres minutos antes de llegar al descanso.

También Piatti tendría la segunda del Espanyol al inicio de la segunda parte, cuando intentó aprovechar una error en el despeje de Jordi Alba para sorprender a Ter Stegen con una vaselina que se marchó fuera.

Antes, Luis Suárez había rematado, de espuela, una asistencia de Alba tras gran jugada de Deulofeu, pero el esférico se estrelló en Pau López.

Un remate desviado de Messi y una asistencia del argentino a Sergio Busquets que, forzado, remató alto, confirmaban que el segundo acto aparecía mucho más animado que el primero. Umtiti sacó, con Ter Stegen ya batido, un disparo de Leo Baptistao a la hora de juego.

Pero el partido se acabó definitivamente cuando Messi combinó con Suárez y Jordi Alba antes de rematar él mismo el 3-0. Con este hat trick, el argentino ya le ha marcado 20 goles al Espanyol, al tiempo que se sitúa al frente de la clasificación del Pichicho de la Liga, con 5.

En la recta final, un cabezazo de Piqué a la salida de un córner y un gol a la contra de Luis Suárez tras recibir una asistencia del debutante Dembélé –jugó los veinte últimos minutos y dio una asistencia– redondearon la goleada azulgrana.

barcelona

Ernesto Valverde dijo después del partido y tras situarse con 4 puntos de diferencia respecto al Madrid, que las distancias no son significativas, pero que prefiere esta situación, mientras que reconoció que el duelo fue más difícil de lo que reflejó el marcador. “Estamos a principios de temporada, todavía las distancias no son significativas pero no siéndolo, es mucho mejor estar por delante que por detrás, sin duda. No sabemos luego lo que puede ocurrir. Está empezando la temporada y no quiere decir nada pero estar por delante siempre es un paso”. Del partido destacó el hat trick de Messi, el buen partido de Luis Suárez y el debut de Dembélé. “Estamos contentos por Messi, que ha hecho tres goles. Luis Suárez es un complemento muy bueno porque siempre da un desmarque y se buscan mucho”. Sobre Dembélé aseguró que “le he visto bien, con desparpajo, y atreviéndose a hacer cosas. Ha dado un gol y tenemos grandes esperanzas”.

Por su parte, Quique Sánchez Flores dijo que “creo que es demasiado castigo. Siempre que jugamos aquí es un partido complejo, difícil, que se ha dado en una jornada que no debía ser válida. El resultado es abultado, tenemos que aprender a controlar los resultados. Hay que protegerse”, añadió.