FÚTBOL PRIMERA DIVISIÓN
Inician el 'Johan Cruyff'
El presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, miembros de su Junta y jugadores de diferentes categorías del club, Andrés Iniesta y Gerard Deulofeu entre ellos, participaron ayer junto a la familia Cruyff en un simbólico acto en el que se puso la primera piedra para la construcción del estadio Johan Cruyff, un proyecto que el club prevé terminar a finales del año 2018.
El acto se celebró en el descampado donde se levantará el estadio, que tendrá una capacidad para 6.000 espectadores y un coste de 12 millones de euros, y con él la entidad azulgrana dio el pistoletazo de salida a la construcción de un espacio que, según Bartomeu, será “la joya” de la Ciudad Deportiva.
“Es un sueño colectivo. Quiero agradecer a los presidentes anteriores: al presidente Núñez por comprar estos terrenos, al presidente Gaspart por ser el que puso la primera piedra de la Ciudad Deportiva, a Joan Laporta por inaugurar la Ciudad Deportiva, y también a Sandro Rosell por dar el impulso final al edificio de La Masia”, dijo Bartomeu.
El máximo mandatario hizo estas declaraciones en un acto institucional en el que se unió el futuro del Barcelona, con la presencia de jugadores del Barcelona B y de las categorías inferiores, y el presente, con la asistencia de los jugadores del primer equipo Gerard Deulofeu y Andrés Iniesta, así como las jugadoras del conjunto femenino Laura Ràfols y Marta Unzué.
A ellos se sumó una representación de la familia del exjugador y exentrenador azulgrana Johan Cruyff con su esposa, Danny, y su hija Susila a la cabeza. Entre los asistentes al acto se encontraban exjugadores del Dream Team que entrenó Cruyff, como José María Bakero, Guillermo Amor y Hristo Stoichkov.
A lo largo de la presentación, todos ellos llenaron de objetos una caja de plástico que, de manera simbólica, se convirtió en la primera piedra del estadio donde jugará el filial azulgrana y el equipo femenino.
Iniesta, que se abrazó con el presidente antes del acto, dejó otra imagen simbólica de tranquilidad tras los desencuentros que ambas partes han tenido sobre la renovación.