DEPORTES
Apuntan muy alto
Un ICG Lleida muy renovado abre hoy una temporada en la que la Copa del Rey y Europa vuelven a ser sus objetivos
El ICG Software Lleida abre este mediodía (12.00) en el Onze de Setembre frente al Alcoi una nueva temporada en la OK Liga, con los mismos retos pero con un equipo muy renovado, rejuvenecido y con un potencial capaz de dar grandes alegrías a su afición. “Este año se van a divertir”, asegura el técnico Albert Folguera, quien por fin ha podido “escoger” a los mejores para su nuevo proyecto. La excusa de que “Lleida queda muy lejos”, esgrimida desde hace tiempo por la mayoría de jugadores cuando recibían una oferta listada, ha pasado a mejor vida, hasta el punto de que el club ha recibido ofrecimientos para jugar.
Hasta cuatro caras nuevas presenta el nuevo ICG 2017-2018, que han dotado al equipo de más físico y calidad, sin renunciar a la experiencia. Los hermanos franceses Bruno y Roberto Di Benedetto (La Vendéenne), el mexicano César Candanedo (Alcobendas) y el reusense Jordi Creus (Vendrell) vienen a cubrir las retiradas de Carlos Trilla, ahora ayudante de Folguera, y Lluís Rodero, y la marcha del canterano Roc Llisa, que jugará este año cedido en el Alcoi, precisamente el primer rival de los leridanos en la Liga. “Este año hemos hecho lo que teníamos que hacer, hemos rejuvenecido mucho el equipo y creo que hemos traído a gente con mucha hambre y ganas de jugar en la OK Liga. Todos nos hemos contagiado del buen ambiente y de la ambición que traen”, afirmó Folguera, que seguirá contando con dos piezas claves como los hermanos Lluís y Andreu Tomàs, la solidez de Joan Cañellas, la genialidad de Darío Giménez y los canteranos Deri Mateix y Albert Mola.
Desde hace un par de temporadas el ICG ha salido con retos ambiciosos, como estar en la Copa del Rey –en ambas se quedó a las puertas– y clasificarse para Europa –lo logró en la pasada. Este año, sin embargo, estos retos parecen mucho más factibles. “A priori salimos a competir por todo. Podemos ganar a todos los equipos, pero no hay que olvidar que también podemos perder contra cualquiera si no hacemos bien las cosas. Tenemos un buen equipo, muy físico y trabajador, que tiene mucho gol y que puede hacer cosas diferentes respecto a otros años. Ahora falta llevarlo a la práctica”, apuntó Folguera, que tendrá el reto de compaginar la Liga con la Copa CERS. Ganar el torneo de Espinho, tras eliminar en semifinales al Oporto en los penaltis y batir al Oliveirense (0-3) en la final, ha dado mayor credibilidad al proyecto. “Si todo va como se ha visto en la pretemporada, creo que la afición se divertirá mucho. Hemos ganado mucho a nivel físico, al margen de que son jugadores técnicamente muy buenos. Ahora somos más peligrosos que antes”, aseguró.